sábado, 9 de mayo de 2009

SIEMPRE QUISE BAILAR COMO EL NEGRO DE BONEY M

Si hace un par de semanas comentaba aquí que el escritor Miguel Sendin, autor del libro "El gusano del mezcal" se había dejado caer por este blog y dejaba su comentario de agradecimiento por la lectura y buena critica de su obra; ... con el libro de hoy sucedió lo contrario un tiempo antes... José Luis Romero, el autor de este "Siempre quise bailar como el negro de Boney M." era quien entraba aquí para hacerse propaganda el mismo y nos invitaba a leer (y comprar) su opera prima.
Picado por la curiosidad y salvando las dificultades que me encontré, finalmente conseguí hacerme con el libro de este barcelonés de 46 años, policía municipal de Barcelona y diplomado en Criminología y Dirección de Seguridad, quien empezó en esto de la literatura publicando artículos técnicos en revistas de seguridad, que mas tarde derivaron en relatos cortos que le llevaron a obtener el Primer Premio del Certamen Día de la Policía de Caceres ¿?. Animado por este reconocimiento, creó los personajes de Evaristo Conrado, detective privado y protagonista de esta novela, así como el del subcomisario Sabastian Orozco cuyas aventuras esperan ver la luz en breve.

En esta novela, con una Barcelona siempre presente, casi como un personaje mas de la trama y a lo largo de sus 316 paginas, nos da muestras del cariño y del conocimiento que siente y tiene por su ciudad. Nos adentramos pues en la investigación de un caso de espionaje industrial, que muy pronto y a tenor de las pruebas, va derivando en una complicada tela de araña en la que están involucrados altos cargos políticos y militares, llegando incluso a los destacamentos militares españoles acuartelados en la misión de Afganistan.
Con una narrativa ágil, Romero nos adentra en los mas oscuros vericuetos policiales y en los bajos fondos de la gran urbe, entremezclado con visitas a los mas selectos ambientes industriales, donde nuestro protagonista, el ex Guardia Civil Evaristo Conrado, se desenvuelve como pez en el agua, con toda su carga de ironía a cuesta y sobre todo con muchisimo cinismo. Debido a ello el personaje se hace a veces un tanto antipático, demasiado de vueltas de todo aquello que le rodea (y sin embargo es así como imaginamos a los verdaderos detectives en la vida real)

Nada timorato el amigo José Luis Romero, sin cortarse un pelo, atreviéndose con un tema en el que Gobierno central, Generalitat catalana, altos cargos militares, grandes trust empresariales y fuerzas de seguridad del estado no salen muy bien parados a lo largo de la historia que nos cuenta (y sin embargo es así como imaginamos los entresijos del poder en la vida real)
Para ser la opera prima de su autor, deja el listón muy alto... como algo difícil de superar. Lo que aumenta las ganas de leer su próxima obra. Esta, por lo menos, no aburre. Al contrario, entretiene y se lee de un tirón, lo que siempre es de agradecer.

3 comentarios:

Unknown dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Unknown dijo...

Hola Alberto.
Soy José Luis Romero, el autor de la novela. Quiero agradecerte la generosidad de tus comentarios sobre Siempre quise bailar como el negro de Boney M y me congratulo de que te haya resultado una lectura amena. Como cada fin de semana googleo el título, he visto tu comentario de ayer.
Además de esto quería decirte que la expansión y publicidad que hice en su momento de la novela fueron causadas por la –novelitud- en esto de escribir y las ganas darla a conocer. De todas formas me alegro que haya llegado a tus manos, aunque sea por este cauce.
He echado un vistazo al reportaje fotográfico del Camino y me parece muy interesante. Hace tiempo que Paz (mi mujer) y yo hablamos de echarnos al camino. Un abrazo.

José Luis.

Lorena dijo...

Me alegro de que el título de tu entrada se corresponda con el de este libro, ya que lo había tomado como un propósito personal que te hacías y ya te imaginaba en plan Daddy Cool...

Un abrazo!!