viernes, 29 de febrero de 2008

Julio 2006, Rafa en Alicante

Aviso de que he subido nuevos albumes de fotos en Picassa. No del Camino de Santiago, pero si de las ciudades que he ido visitando gracias a los reencuentros con mis amigos de la Ruta.
Y lógicamente no podía faltar mi propia ciudad, Alicante. De esta, como la tengo mas cerca, procuraré ir añadiendo mas imágenes de sitios de interés, o de lugares que en un futuro cercano desapareceran o cambiaran, y que sería interesante recordaramos después.
Y seguidamente contaré como el 7 de julio 2006, Rafa el almeriense cumplió su promesa y nos hizo una corta pero intensa visita en la Terreta.
Tras los besos y abrazos de bienvenida (besos a MªDolores y abrazos a mi, nadie vaya a creer que Rafa y yo.... de tonterias y mariconadas nada, ! eh ¡) bajamos los tres hasta el centro de Alicante desde Santa Faz, donde el almeriense había llegado tras perderse a la salida de la autovía. Descubrí que el sentido de la orientación no es uno de sus fuertes.
Visitamos La Casa de La Festa, y al igual que unos meses antes con nuestros vascos, tuvo una idea de los que eran nuestras fiestas de Hogueras de San Juan. El Museo de hogueras, es un buen lugar para hacer una parada con visitantes de otros lugares. El colorido de los ninots y todas las cosas que allí se exponen resultan muy interesantes y atractivas para los que desconocen nuestras tradiciones. Un lugar tranquilo, poco visitado, y que en solo media hora se conoce por entero, y deja en buen sabor de boca.
Un paseo por el Barrio, desangelado a esa hora del día. Visita a la Concatedral de San Nicolas, Ayuntamiento y Explanada hasta llegar Canalejas. De nuevo, y en sentido contario por el Paseo Marítimo fuimos a la Playa del Postiguet, atestada de bañistas en aquel asfixiante dia de verano.
A la hora de comer, y aprovechando que visitabamos la zona de ocio del Puerto, fuimos hasta el restaurante Santi, donde nos metimos entre pecho y espalda unas buenas gambas rojas y un arroz marinera, regado con un blanco de la Marina Alta. Elegimos la terraza para comer y a los diez minutos, entre la copiosa comida y el calor, estabamos pegados a las sillas debido a los sudores que nos corrían por los camales de los pantalones.
El café y la copa nos los tomamos en Panoramis, para tener otra vista del Puerto, los yates y de fondo el Castillo Santa Barbara. En aquel momento llamamos a Javier y Esperanza por teléfono para que tuvieran constancia de la promesa cumplida, y por aquello de darles envidia.
Decidimos trasladarnos a la Playa de San Juan, pero antes y ya con el coche, giramos una rápida visita por las calles mas importantes de la ciudad y subimos hasta el Castillo San Fernando para nuevas panorámicas y perspectivasde Alicante.
Nuevo café y copa en los pubs del Campo de Golf, donde Rafa nos contó su reciente viaje a Argentina, sus planes en cuanto a sus estudios y un poco de su vida cotidiana en Almería.
Para la cena habíamos invitado a acompañarnos a mi hermana Isabel, y esta había reservado mesa en un asador argentino de la playa. Antes fuimos al apartamento de los padres de MD para saludar a Alvarito, pero este en verano anda muy atareado con sus amigos de la playa y fue un simple hola y adios. ! Crie usted hijos para esto ¡ Hay veces, que cuando va con su peña, ni te saluda o hace como que no te ve, como si se avergonzara de tener trato con sus padres. Creo que se llama.... la edad del pavo... y todos la hemos pasado.
Sin embargo Rafa se ganó a mis suegros simplemente con ponderar lo bonito del apartamento de playa y su urbanización. Un comentario lisonjero de lo bien que lo tenían, dos chascarrillos con su acento andaluz, y desde entonces mis suegros siempre preguntan por el y se interesan por como le irá llamandolo "aquel encantador muchacho".
Dimos un corto paseo por la según Rafa inmensa Playa San Juan, y llego la hora de la cena. Presenté a mi hermana, y en eso que nos trajeron un correoso asado criollo. Para mi que el cocinero era de Navalcarnero, y de Argentina solo conocía a Maradona. Los cuatrocientos gramos de carne nos duraron una barbaridad, masticándola con mucho esfuerzo, pero la velada resulto genial gracias a las ocurrencias del almeriense, que ante publico nuevo, y ademas femenino, se superó a si mismo una vez mas.
Cuando pasamos a recordar y contar nuestras aventuras por el Camino, relatadas de un modo jocoso y desenfadado, hicimos las delicias de MªDolores y mi hermana Isabel. Y yo no sabía hasta que punto impactaron nuestras historietas a Isabel, hasta que un par de semanas después, me anunció su intención de hacer ella misma el Camino de Santiago aquel año.
Mas allá de las once de la noche, dos horas y media rumiando carne, conseguimos acabarla. Como a Rafa le quedaban aún por delante 3 horas de viaje hasta su casa, decidimos dar por finalizada la velada y el su visita a nuestra tierra. De nuevos besos y abrazos (... no creo necesario recordar el reparto... pero, por si hay algún despistado... que mire el principio de esta entrada) y de nuevo lo acompañé hasta el lugar en que había dejado su coche. Hicimos promesas de volver a repetir estos encuentros y estuvimos de acuerdo en que ahora nos correspondía a nosotros visitar Almería, que según nuestro amigo, y como mas tarde también comprobamos nosotros, ambas ciudades tenían un notorio parecido.
Tras algún titubeo para entrar en la autovía (de nuevo el sentido de la orientación que fallaba) el almeriense marchó hacia Andalucía, y acabó un magnífico día en compañia de nuestro buen amigo.

jueves, 28 de febrero de 2008

Semana Santa 2006

En el mes de Abril 2006, y mas concretamente el Jueves Santo, llegaron Javier y Esperanza a Alicante para pasar unos días en nuestra Semana Santa. De hecho me encontraron, o mas bien yo los ví de pura casualidad cuando procesionaba con mi Paso del Cristo de la Caida. Con la capucha del habito monacal de nuestro uniforme era dificil reconocerme, y tuve que, contraviniendo todas las ordenes de mi Capataz Alberto Guijarro, hacer aspavientos para que se percataran mis amigos de mi presencia.
Acabada la procesión solo tuvimos tiempo para un rápido abrazo y para quedar al día siguiente, pues quedaba aún desmontar el Paso y la figura en su lugar de culto.
Al día siguiente, tras presentar a MªDolores y Alvaro a Javier y Esperanza, tocó visita turística por Alicante. Un día completo en el que nos pateamos infinidad de calles y sitios de la ciudad.
Por la noche mas procesiones. Entre lo mucho que hablamos nos comentaron que se habían desviado en Valencia hasta Enguera, con el fin de realizar una visita a Miguel nuestro compañero del camino. No pudieron ver al valenciano, en aquellos días de viaje por su trabajo de tranportista, pero pudieron conocer a las hijas, a Trini, su esposa, y a su activo y festivo padre. Por lo visto lo habían pasado muy bien en casa de Miguel a pesar de no coincidir con él.
Fue el sabado cuando, a buena hora, salimos en mi coche hacia Garrucha donde habíamos quedado previamente con Rafa, a fin de reunirnos todos de nuevo.
El almeriense había reservado mesa en el restaurante Escañez del Paseo Marítimo, donde un agitanado maitre nos recomendó, muy acertadamente, un Gallopedro en rustidera. Del enorme pescado solo quedó la raspa, ya que entre Javier y Rafa acabaron con el caldo mojando pan.
Durante la tertulia que se formó despues, hice entrega a mis amigos de la parte de mi diario en la que caminamos por Navarra y La Rioja. A pesar de las muchas hojas de que constaba empezaron a leerlo allí mismo.
Mas tarde, acabados los postres, salimos para tomar café en algún lugar mas tranquilo y continuamos con las charlas y las risas, ya que como siempre Rafa rstuvo inspiradisimo y nos obsequió con sus últimos chistes y ocurrencias. ! Un auténtico showman este tio ¡
Sacamos el tema de nuestro nuevo proyecto común del Camino adentrándonos un centenar de kilómetros en Francia, que desconocían los vascos. En principio estuvieron vivamente interesados e incluso propusieron que uno de sus hijos nos llevara en coche desde San Sebatian hasta nuestro punto de salida en "Gabacholandia". Pero al año siguiente no recordaban nada de todo aquello, o había decaido aquel interés inicial por lo que el proyecto no prosperó.
Paseamos largo y tendido por el Paseo, intercalando charla, risas y fotografías en grupo. Y cuando la tarde tocaba ya a su fín y llegaron las despedidas hicimos los votos de nuevos reencuentros y los mejores deseos para nuestro amigo, que pronto se marchaba a Argentina de viaje de placer.
Regresamos cansadisimos y ya entrada la noche del viaje, con lo que quedamos para el día siguiente, Domingo de Resurección, para presenciar la espectacular procesión que comenzó nada mas acabar la Misa en la Basilica de Santa María. Vimos salir a la Virgen de la Alegría, portada por los costaleros ataviados con sus trajes típicos festeros de zaragüell, entre los cuales tengo muchos amigos y compañeros. Vimos bajar el Trono por las escaleras hasta la calle Jorge Juan, y posteriormente el lanzamiento de Aleluyas desde los balcones del Ayuntamiento y el Encuentro con la imagen del Resucitado.
Fuimos paseando hasta la casa de la Festa para que nuestros vascos conocieran detalles de las Fiestas grandes de Alicante, Las Hogueras de San Juan, y al terminar conseguimos llegar aún al acto final de la procesión, una pequeña Mascletá lanzada en la confluencia de las avenidas Jaime II y la Rambla. El ensordecedor ruido, la cantidad de petardos, el hum, el peculiar olor a polvora quemada y el Terratremol final, impactaron a los dos donostiarras, a los que pareció agradar nuestras costumbres. Y se hubieran ido con mejor sabor de boca, y nunca mejor utilizada la frase, si hubiera estado yo mas acertado con la elección de la comida, ya que nos decantamos por un Arroz a Banda (de menú) que estaba para matar al cocinero. Una oportunidad perdida para dejar a nuestra Provincia en mejor lugar, en cuanto a lo gastronómico.
Ya por la tarde nos encaminamos hasta la zona de ocio del Puerto, donde tomamos café y una copa, charlando largo y tendido de temas de actualidad, derivando la conversación con Javier en temas políticos y de nacionalismos. No conseguimos arreglar el Pais (ni el suyo...) con lo que nos dedicamos a sacarnos fotos con los yates del puerto y con el Castillo de fondo.
Sobre las ocho de la tarde, tocaba turno de despedidas. Como 24 horas antes, en el momento del adios con Rafa, nos deseamos lo mejor, hicimos planes de volver al Camino juntos algún día, y resulto que solo un año despues cumplimos con aquellos deseos, y volvimos nosotros a casa y ellos a su hotel. Javier y Esperanza salieron al día siguiente de regreso a San Sebastian, una ciudad que no conozco y que tengo mucha ilusión por visitar. Y seguro estoy, que cuando tengamos oportunidad y viajemos hasta allí, mis buenos amigos serán unos perfectos cicerones, tal y como lo intentamos nosotros aquellos pocos días.

miércoles, 27 de febrero de 2008

Contestándo a los amigos

Empezaré con Rafa de Almería. He recibido las fotos de tus prácticas de vuelo en avioneta y solo me caben dos palabras: "im presionantes". Sobre todo la de la cara de susto que pones cuando caeis en barrena (¿O estabas aterrizando?) Porque, sí señoras y señores lectores... Rafael es amante de los deportes de riesgo. Y no contento ya con el parapente, el vuelo sin motor, los saltos en paracaidas, el tae kwondo, duras salidas nocturnas y el Camino de Santiago, en su busqueda incansable de que tengamos que mandar las flores y los mesajes de pésame a la avenida Federico Garcia Lorca, ahora recarga adrenalina con clases de vuelo. ¿No será mejor seguir con las imitaciones de Faemino y Cansado?... ahora que le habías cogido el punto e incluso lo bordabas poniendote las ramitas de espliego a modo de pitillito... faltando solo la copita de "coñá". En fin... cada loco con su tema.

A Rafa Gambin, decirle que siguiendo con sus buenos consejos, volví con los intentos de recuperar mi foto en el blog, y por arte de birli birloque, tocando un botón por aqui y dos por allá, se apareció la Macarena en carne mortal. Me iluminó y consiguió que volviera la dichosa foto. La verdad es que me hubiera gustado mas que aparecieran los números de la combinación ganadora de la Primitiva, pero algo es algo. ! Loados sean el Señor y su Apostol Santiago por tan exitosa iniciativa !

Y ya que estoy inspirado hoy, contaré la aventura de mi amigo al paso por Monforte del Cid, otrora pequeño pueblo industrial y agrícola de la provincia de Alicante.

Cuenta una leyenda urbana, que hace algunos siglos, (al menos un porrón de años), tras unas torrenciales lluvias en el Alto Vinalopo (Hoy Gota Fría) la riada fue arrastrando todo tipo de desperdicios y restos por el cauce del rio. Quiso el destino que uno de estos restos fuera una mula o asno que no sabía nadar y se había ahogado monte arriba. Al paso de la riada por Monforte, un labriego, que andaba por ahí pasmado ante tanta agua, observó el bulto sospechoso que formaba la pobre mula ya hinchada por tanto liquido, y corrió hasta el pueblo gritando que había una.... BALLENA en el rio. Como allí son mas bien de secano, todo el pueblo salió en tromba con la intención de pescarla, o al menos verla. Con el tiempo, este absurdo episodio, pasó a los anales de la provincia y hoy día hablar de Monforte es hablar de la ballena.

Así las cosas, Rafa y yo, con 14 años viajabamos un domingo, bien temprano, en el autobús del equipo de baloncesto para jugar un partido en la vecina Novelda (de siempre los noveldenses han sido mas brutotes que los monfortinos, pero tuvieron la suerte de no decubrir ellos a la mula... si no hoy serían ellos los del chiste) El caso es que, al atravesar el pueblo, Rafa con su mas de metro noventa, y medio cuerpo fuera de la ventanilla, se puso a gritar... la ballenaaaa, la ballenaaaa a los pocos pero atónitos paisanos que se entretenían viendo pasar el trafico por la avenida. Al chofer de nuestro autobús, que no era ni de Monforte ni de Novelda, simplemente era un cabrón, no se le ocurrió otra cosa que frenar súbitamente el vehículo en plena plaza y dirigiéndose a Rafa y abriéndole la puerta, le dijo que bajara y se lo dijera a la cara a los pocos mozos del pueblo que habían madrugado aquel día.

Debo reconocer que hasta yo me rei de mi amigo, que se había quedado blanco por el brete en que lo ponía el conductor de Autobuses Monllor, pero cuando la exigua y exaltada turba de mozos (exigua sí... pero jodidamente hostil), empezó a correr hacia nosotros, sin duda con animos de lo que hoy sería una "Revisión de la Memoria Historica", el "acojone" lógico se contagió por todo el bús, incluido el chofer que arrancó de inmediato dejando atras a las gentes del lugar, que aún corrieron algunos centenares de metros detras de nosotros llamándonos de todo, menos guapos. Menos mal que no había semaforos en rojo y continuamos hacia el siguiente pueblo... sino hoy estaría relatando otra cosa mucho peor.

Y esta es la historia, de la que espero no haber olvidado nada... ni haber exagerado demasiado. Caso de que no fuera así, espero que Rafa me corrija, pero advierto, que el pasado sabado durante mi estancia en el pueblo indagué sobre el episodio, y algunos viejos del lugar aún se acuerdan de aquella aciaga mañana, en que un irresponsable mansilló el buen nombre de la "Siempre Noble y Fiel Villa de Monforte. Los carteles de Busca y Captura, incluida recompensa, y foto de mi amigo, fueron retirados hace solo unos pocos años

En cuando al comentario de la Amante del Camino... decirte que, sería un honor que viviendo mas cerca, pudieras acompañarme a mi, y a mis compañeros del Camino del Sureste, en las etapas por Alicante y La Mancha. Seguro que lo pasarías bien. Que sintiendolo mucho, mi mujer no me acompañará caso de que finalmente salga adelante el proyecto del puente de Mayo. Imagino que en otras circunstancias le ilusionaría poder venir conmigo, tal y como hizo el pasado año por León, pero la reciente enfermedad de Alvaro se lo desaconseja. Veo que tu también andas preparando algún tramo para este verano, y vas entrenando para la ocasión. Nuestros entrenadores de los equipos de baloncesto en los que jugamos de jovenes, siempre decían que el entrenamiento continuado era la clave del exito y las victorias. Y es cierto... tanto yo, como mi amigo Rafa Gambin... incluso la Ballena de Monforte, son testigos de que esa, es una gran verdad.

martes, 26 de febrero de 2008

Con Rafa en Garrucha

El 15 de Diciembre 2006 nos encaminamos hacia Almería, mas concretamente a Garrucha.
Tras varias llamadas, en las que Rafa y yo buscamos la oportunidad de volver a vernos, decidimos hacerlo en aquel fin de semana, y quedar a "mitad de camino" según el almeriense. MªDolores y Alvaro podrían conocer a Rafa, del que tanto y tan bueno les había contado.
A la hora señalada y en el lugar acordado, el Ayuntamiento de Garrucha, nos dimos de nuevo un fuerte abrazo. Tras las presentaciones, en la que ya Rafa, con un simple piropo se ganó a una admiradora mas en MªDolores, y con su simpatía también a Alvarito, realizamos un pequeño paseo por el Puerto haciendo tiempo para la hora de comer. Rafa había elegido un restaurante, especie de chiringuito, en el mismo puerto. Restaurante El Birra se llamaba el lugar, con un inmejorable aspecto debido a los mostradores que tenían en la calle y donde exponían el género, consistente en toda clase de pescados frescos y un surtido excepcional de mariscos de la bahía.
Una vez en la mesa, nos decantamos por unas muy respetables gambas rojas y cigalas a la plancha, y como plato fuerte un Arroz Garruchero, que consiste en un arroz caldoso con calamares, gambas, mero, rape, boquerones y mejillones. Todo ello regado con un Blanc Pescador de la elección del almeriense.
Nos pusimos manos a la obra devorando aquel exquisito arroz sin dejar de hablar y contar cosas. Rafa nos informó de que estaba en tratos para comprar un par de bungalows en la zona de Alhama de Murcia, así como de sus preparativos para un viaje a Argentina con ocasión de una boda familiar.
Durante la comida, y solo para darles envidia, llamé por teléfono a Javier y Esperanza, y ambos pudimos hablar un poco con nuestros vascos. Eso dió pie a que iniciáramos un pormenorizado relato de nuestras "batallitas" por el Camino ante la expectación de MªDolores y Alvaro.
A los postres, Rafa ya había perdido la verguenza ante los desconocidos... el vinito también tuvo que ver para soltarle la lengua, e inició su larga lista de chistes ante el regocijo de nuestro chaval.
Tras pagar yo la cuenta, lo que dejó bastante cortado a nuestro amigo y exigió que la proxima visita debería ser en Almería y a su cargo, nos dirigimos hacia el Paseo Marítimo donde elegimos un pub donde tomar café y una copita. Allí ya Rafa estaba desencadenado, y nos hizo llorar de risa con sus ocurrencias y sketchs de Faemino y Cansado, sus ídolos, intercalando de vez en cuando algunos momentos memorables durante el Camino por Navarra.
Caímos en la cuenta de que hacía apenas tres meses de aquella aventura (aunque a Rafa le había durado mas pues había continuado hasta Santiago). A mi me parecían tres siglos por lo lejano que lo tenía en la memoria, y a cada episodio que él rememoraba me volvía a asaltar la risa y también cierta nostalgia.
Hicimos planes para volver juntos a la Ruta, y a poder ser, internandonos 100 Kms. en Francia para conocer la peregrinación en casa de los gabachos. Era algo a pensar y tener en cuenta.
Cuando ya empezaba a caer la tarde, no tuvimos mas remedio que iniciar las despedidas.
Pocas horas, al igual que nos ocurriera en La Herradura el mes anterior, pero igualmente, bien aprovechadas en compañia de un magnifico amigo, que a partir de ese día también lo fue de MD y Alvaro. Sobre todo de este último, que no paró en todo el trayecto de vuelta a Alicante de recordar los chistes contados por Rafa y reirse solo, como un tonto, en el asiento de atrás.
Antes de marchar, conseguimos sacarle la promesa al almeriense, de que nos visitaría en la Terreta, para conocer Alicante. Cosa que naturalmente cumplió... pero eso quedará para mas adelante.
El viaje de ida y vuelta en tan poco tiempo se nos hizo pesado, pero quedó compensado, y con creces, por aquella oportunidad de volver a un amigo que no habíamos desaprovechado.

lunes, 25 de febrero de 2008

Chirimoyas de La Herradura

Desde hace ya varios días veo con resignación como la foto que decoraba el blog ha desaparecido sin que se sepa la causa. Cosas de internet.
Ayer cuando intentaba recuperarla sin exito, e iba pensando en la entrada de hoy para contar el reencuentro con las granadinas que se produjo el 1 de noviembre de 2005, recibí una de sus llamadas telefónicas... coincidencias de la vida. Inma y MªAngustias, que cuando estan aburridas cogen el móvil y chafardean con cualquiera que pillan para pasar el rato, me eligieron a mi para sus marujadas de tarde de domingo. Tras explayarse a gusto con el tema de la separación matrimonial de nuestros compañeros asturianos, Alberto y MªJesus, me hicieron la advertencia de que debía ir preparando ya el trayecto para el 2010 en el que se vendrán conmigo. Se me acumula la faena por momentos. Aun no tengo totalmente perfilado el proyecto de escapada del puente de Mayo, ni mi tramo hasta O'Cebreiro de Septiembre y ya tengo que trabajar en algo que puede que ocurra dentro de dos años. Pero estas granadinas son tremendas... que le vamos a hacer?
Aquel reencuentro se produjo a raiz de un viaje a Lanjarón (Granada) que hicimos aprovechando el puente de Todos los Santos. Tras pasar un día por la Alpujarra y no perdonar un buen plato alpujarreño en Bubión, y otro en una escapada a Granada capital, el último día lo habíamos dejado, MªDolores y yo, para hacer una visita a nuestras amigas en La Herradura.
Llegamos hacia el medio día, ya que antes visitamos Motril y Salobreña y encontamos a Mari y a Inma preparando los ramos y centros de flores que por la tarde llevarían a sus difuntos al cementerio. Las granadinas, avisadas con anterioridad de nuestra llegada, habían organizado de inmediato una comida de celebración, y con cuatro llamadas habían logrado un cuorum de aproximadamente unas veinte personas, entre familiares y amigos... cura del pueblo incluido. El lugar elegido fue uno de chiringuitos al borde del mar, en plena playa, y el menú consistió en varias clases de pescaditos fritos, calamares y chipirones, y como plato fuerte... como siempre... migas. El cañizo que como entoldado de la terraza del bar nos cubría del día de sol que felizmente nos hacía, no fue suficiente para que, cuando las migas fueron hinchándose en nuestros estomago, nos entrara a todos un sopor y unos sudores de escándalo.
Pero las amigas no estaban dispuestas a que la fiesta decayera y tras los postres me obligaron a acudir hasta un huerto propiedad de un familiar suyo, al otro lado de la carretera de la playa, y allí provisto de una caja de cartón que nos había facilitado el dueño del restaurante, me fueron cargando de chirimoyas que yo mismo hube de ir cogiendo de los árboles a medida que me las iban eligiendo. Con barro hasta los tobillos, pues o bien habían regado recientemente o bien la lluvia había visitado La Herradura hacía poco, volví hasta el resturante y el coche, para llenar el maletero con algo mas de 20 Kgs. de fruta, algunas de casi un kilo de peso cada una, y todo porque MªDolores, que no siempre saber estarse calladita, había comentado que le encantaban las chirimollas.
Cuando el resto del personal invitado fue marchándose hacia sus casas, sin duda para darse una siesta, cosa que nos estaba vedada a nosotros ya que las amigas nos convencieron para tomar un café en una cafetería-pastelería próxima, en pleno paseo marítimo, y poder charlar mas a gusto. Así es como consiguieron salvar una aburrida tarde festiva las tres. Pastel vá, pastel viene... (entre medias, lamentaban los kilos de mas que las adornaban... y que son muchos) fueron desgranando todas las preguntas y chismorreos que les interesaban (MD incluida) hasta que, casi pasadas las seis de la tarde, recordaron que debían ir al camposanto para llevar sus flores.
Habían sido unas pocas horas juntos. Suficientes para comprobar que mis amigas seguían como siempre... dicharacheras, alegres y desbordantes de simpatía y generosidad... aunque luego la procesión y los problemas vayan por dentro, pero dando siempre el estereotipo de los buenos andaluces.
Nos despedimos de ellas e iniciamos la fuerte subida hasta la Alpujarra, oyendo en cada curva como las chirimoyas golpeaban el maletero del coche.
De nuevo en Alicante, mi señora estuvo comiendo chirimoyas durante casi un mes,... y su madre, .... y los vecinos de su madre... Hubo para todos.
Aquellas granadinas exageradas, estuvieron a punto de lograr que pusieramos una tienda de ultramarinos en la esquina. Pero... Benditas Amigas.

domingo, 24 de febrero de 2008

Etapa por el Sureste

Entro esta mañana en el blog de Rafa Gambin. ("Vivirconcancer", con vinculo en Mis Favoritos) Y me encuentro con El Senador MacCain, candidato republicano a las presidenciales estadounidenses, deseándome un feliz Camino de Santiago con el mas puro acento tejano. Le votaré a el, ya que ni Rajoy ni Zapatero me llevan en sus programas electorales ni a nada relacionado con el Camino. Y pienso...¿para cuando una subvención para esto? ¿Para cuando un bocata de jamón gratis a cada caminante?... Mejor aún, ...cuatrocientos euros y yo ya me compraré el jamón.
También veo el comentario de Rafa de Almería, él siempre tan corrosivo con los guiris, pero echo en falta unas palabras sobre el mercantilismo en que se está convirtiendo este milenario Camino, donde hasta el mas tonto ya hacía relojes. Sobre todo la Xunta de Galicia, que ojo avisor a la posibilidad de negocio, se marcha hasta Japón para inundarnos los albergues en el Año Santo (el gran día de mercado) esta vez de chicos de ojos rasgados. Calladitos y sonrientes, eso si, pero ¿No eramos ya suficientes?
Y paso a comentar la etapa de ayer sabado por el Camino del Sureste. Decia el viernes que era repetición de las mismas etapas de años anteriores, pero estaba en un error, ya que los miembros de la Asociación, en previsión de que pudieran ser aburridas, han dedicado parte de los meses de invierno en buscar nuevas posibilidades con rutas alternativas, aprovechando la Ruta del Cid o la del Poeta Miguel Hernandez.
Ningún año estoy atento, y casi siempre me pierdo la primera etapa. Pero a esta segunda no podía faltar, con lo que cargado con mi botella de agua y mis bocatas congelados del día anterior a las ocho de la mañana me reencontraba con los compañeros del Sureste, y llegabamos a Orito antes de las nueve. Breve visita a la iglesia donde solo dos feligreses oían la misa e inmediatamente iniciabamos la marcha. Ya en el bus habíamos iniciado la charla y puesta al día de noticias. Sobre todo con mi amiga Berín, y esa fue la tónica del viaje, que continuamos durante los pocos kilómetros hasta Monforte del Cid, pueblo en el que siempre me acuerdo de Rafa Gambin y la ballena, por una de sus peripecias acaecida hará mas de treinta años.
En Monforte tocaba almorzar aunque solo llevabamos media hora en la ruta. Lo hicimos la mayoría en un parque del centro, donde yo fui quitándole la escarcha a mi jamón de york. Luego un rápido café en el mismo bar donde nos perdimos mi hermana y yo el año anterior, pero en esta ocasión junto a Ana, una peregrina a la que apenas había tratado hasata ahora, pero que se convirtió en todo un hallazgo por su simpatía, su amena conversación y su risa fácil.
Resultó que Berín, tal y como prometió, entraba asiduamente en este blog, y estaba al cabo de la calle de todo lo que cuento aquí. Ademas había pasado la dirección a Crecen, Fini y a Tere, su cuñada, con lo que el blog estaba siendo seguido por varias de mis compañeras, aunque sean de la legión de los no comentaristas. Incluso Berín se postuló y apuntó para la escapada al Camino en Mayo, vendiendo el tema, y muy bien, entre el resto de amigas, lo que supuso otras posibles viajeras... tal vez Crecen, para no ser la única mujer de la expedición.
El camino hasta Petrer, los casi 21 kms. de la etapa, los hicimos en una agradable charla, llena de bromas y risas. Fue una etapa que, a pesar de continuas subidas y bajadas, se me hizo muy agradable por el excelente ambiente que se creó de manera espontánea.
El paisaje, salvo en algunos tramos con obras del futuro AVE, y otros en que tuvimos que transitar por alguna carretera comarcal sin tráfico, era el propio de nuestra provincia en esta época del año, viñedos embolsados, almendros ya perdida la flor, pero de momento ausencia absoluta de las amapolas. Atravesamos algunos barrancos que en invierno tenían un aspecto mas agradables y menos aridos de lo acostumbrado, los aledaños de la mole montañosa de la Silla Del Cid, zonas de chalets y bungalow en la proximidades de Petrer, y finalmente llegada hasta sus primeras calles cuando apenas eran las dos de la tarde.
La subida a la Iglesia de San Bartolomé, donde las vidrieras, curiosamente, tienen solo motivos de Moros y Cristianos, y luego a la ermita de San Bonifacio y el Cristo, aún mas arriba, nos sirvió para tener una excelentes vistas de Petrer y Elda y para hacernos unas fotos del numeroso grupo, 60 peregrinos, un autobus completo.
Una vez en las inmediaciones del campo de futbol, lugar en el que ya nos esperaba el bus para el regreso, buscamos un bar donde comer, y lo encontramos cerca del Centro Comercial del Vinalopo. En la cervecería Karpa compramos las bebidas y sacamos los bocadillos, los frutos secos y la latita de atún de Berin. Mas tarde aparecieron las galletitas, los datiles y las tabletas de chocolate para el postre. Con una de estas tabletas, una de chocolate con higos, se consiguió continuar con las bromas y chanzas, y así llego la hora de regreso a casa, y a las cinco, algo cansados pero muy contentos por un dia genial, en el que las risas fueron una constante durante toda mañana, y donde incluso la climatologia fue nuestra aliada con un día de sol y casi calor, nos despedimos hasta el dia 14 de Marzo en que volverémos a otra de estas etapas del Sureste.
Un café en el Iruña con MªDolores, que siempre gusta de venir a recogerme a la llegada, y subida a casa para la reconfortante ducha. Ahora a esperar la nueva salida, y que esta vuelva a ser igual de agradable.

viernes, 22 de febrero de 2008

Manaña, cerrado por descanso del personal

Mañana sabado, salgo con la Asociación de Amigos del Camino en Alicante a realizar una de las etapas del Camino del Sureste. Una repetición de etapas del año anterior, y del anterior, y del anterior... pero que sirven para ir matando el gusanillo, como entrenamiento para el tramo del verano y sobre todo para quemar mi azucar, que lo tengo disparado.
Y ya que estoy escribiendo, comentaré un pensamiento de Rafa de Almería, leido en su diario, que recientemente me envió y que hoy he revisado.
El comentaba el compañero, el gran numero de peregrinos japoneses, coreanos, y en general asiaticos que se encontró este pasado año 2007 en el camino. Yo también me he encontrado este año por Burgos, Palencia y León a numerosos asiaticos. Revisando artículos publicados en la revista Peregrino que edita la Federacion de Asociaciones Jacobeas, y que recibo como socio de la de Alicante, leo la siguiente noticia que dará algo de luz a este fenómeno detectado con los japoneses:
" !Se buscan peregrinos del Pais del Sol Naciente¡ - Con la vista ya puesta en el próximo Año Santo Compostelano 2010, la Xunta de Galicia ha desarrollado esta pasada primavera (la del año 2007) en las principales ciudades japonesas una campaña de promoción turística sobre el Camino de Santiago, dado el alto poder adquisitivo con la que suelen viajar los turistas nipones y apoyándose en dos circunstancias aparentemente intrascendentes: una la proverbial religiosidad del japonés; y dos, que en Japón se desarrolla una de las peregrinaciones mas multitudinarias del mundo, El Camino Kumano, que también está declarado Patrimonio de la Humanidad al igual que la Ruta Jacobea"
Con lo que creo que ya tenemos la respuesta al enigma o a la curiosidad de tanto japones y coreano puesto a andar de este año.
Ahora Rafa, debería opinar sobre la noticia, y sobre todo por lo de " dado el alto poder adquisitivo".

Reencuentros en 2005

El mas raro de los reencuentros con los compañeros o conocidos se produjo a al mes de mi regreso. Creo haberlo relatado ya en una entrada anterior, pero volveré a contarlo, pues creo que tiene su punto de curiosidad.
A la altura de Calle, un pueblecito de la provincia de la Coruña, un peregrino anonimo me ayudó a colocarme el poncho cuando caían unas gotas de lluvia mientras andaba. Prácticamente no cruzamos palabras, salvo para darle yo las gracias por la ayuda y él para despedirse. Luego, ya en Santiago, y mas concretamente en el hotel en que me hospedé, resulto que teniamos habitaciones contiguas y volvimos a vernos fugazmente y cruzarnos los pertinenetes saludos.
El dia 14 de Octubre de 2005, mi mujer y yo acudimos a la boda de una compañera de despacho de MªDolores. Una de las jovenes abogadas del despacho se casaba y acudió el despacho entero a la celebración, entre ellos uno de los abogados socio del bufete, con el que coincidimos de compañeros de mesa. En un momento dado, en el que comentaba que hacía poco había vuelto del Camino de Santiago, entré en la conversación para decirle que yo también acababa de volver de allí. Nos quedamos mirandonos durante unos segundos, y casi a la par caímos en la cuenta de que nos conociamos de aquel tramo por Galicia. Aquella persona era el joven que me auxilió en Calle y que mas tarde durmio en la habitación al lado de la mia en el Aire Nunez.
Una increible casualidad hizo que me reencontrara, donde menos me lo esperaba, con una persona con la que compartí solo un par de minutos en el camino, un minuto en cada ocasion, pero habían bastado para que quedara grabado tanto en mi memoria como en la suya el incidente. Puede parecer una banalidad sin la mayor importancia, pero para ambos fue un momento emocionante, el volver a vernos y por fin conocernos, y que las vueltas de la vida y las casualidades nos hubieran reunido de nuevo a los dos.
Ni que decir tiene, que el gesto de Rafa Ballester, que así se llama mi buen samaritano, da una muestra del espíritu de compañerismo que suele reinar en la Ruta, un espíritu de ayuda desinteresada al compañero de fatigas en apuros, sin importar la naturaleza o condición de las personas. Y una muestra mas de la grandeza del Camino, que muchas veces consigue cosas imposible en otros órdenes de la vida, como es que ínfimos detalles que en cualquier otro momento quedarían olvidadas al segundo, allí, inmersos en esa dura aventura, ese aprender cada día una cosa nueva de otras personas o de uno mismo, esa mezcla de misticismo arte y naturaleza pura, cualquier pequeño detalle alcanza categoría de importancia.
Rafa Ballester marcha al camino a la menor oportunidad que tiene, incluso en escapadas de solo dos o tres días. Le ayudan a desconectar del stress del trabajo y como válvula de escape a la tensión acumulada del día a día.

jueves, 21 de febrero de 2008

De vuelta en casa

Antes de continuar, y habiendo repasado los comentarios de los últimos días, veo que se me pasó contestar a Anonimo/a, y a la Amante del Camino. Por la forma de escribir, me parece que es la propia Amante que escribe dos veces, pero que se equivoca al enviar los comentarios. Caso de que no fuera así, la alegría sería doble, pues sería señal que una nueva lectora de fin de semana se une al blog, y se atreve a intervenir y a participar. Contestando al tema de la fotografía, debo confesar que me encanta hacer fotos. Y luego revisarlas, ponerles fecha y titulos para no olvidar y poder recordar cuando fueron hechas, agruparlas, tratar de mejorarlas, y gracias a mi amigo Gambín que me descubrió el programa de Google, Picasa, poder tenerlas guardadas en el "sitio" sin que ocupen espacio en el disco del ordenador. No soy un especialista ni estudioso de ese arte, pero consigo de vez en cuando sacar alguna que otra bastante buenas o que, al menos a mi, me gustan mucho. Por ejemplo en el Camino, no tener una buena colección de fotos de esos días me parece imperdonable, y yo me empeño mucho en ello.
Y continuando con las aventuras, decir que llegamos a Alicante sobre las ocho de la mañana de aquel Viernes 16 de Septiembre 2005, y que gracias a la anteriormente denostada chinita, conseguí no dejarme olvidado mi polar en el asiento del bus, y que cuando ya estaba abajo recogiendo mi mochila, la chavala me lo bajo y entregó. Todo un detalle por su parte, lo que le agradecí efusivamente por medio de gestos y moñisquetas.
Subí rápidamente hasta casa para ver de desayunar con MªDolores antes de que se fuera al trabajo. Una semana sin verla, ni a ella ni al resto de seres queridos de la familia, habían hecho mella, y a pesar de que el contacto telefónico había sido, como siempre, de varias veces al día, no era lo mismo que tenerla abrazada entre mis brazos.
A media mañana recibí una llamada de Javier y Esperanza, que ya habían llegado a Donosti. Mas tarde llamé yo a Rafa para saber como le iba, y supe que aquella mañana se había levantado muy fastidiado de sus rodillas y solo había conseguido llegar hasta Navarrete, a solo 10 Kms. de Logroño.
Durante los siguiente 29 días que aún tardó en llegar hasta Santiago, tanto yo como los vascos, hicimos un exaustivo seguimiento de los avances del almeriense, llamándolo y hablando con él cada dos o tres etapas, y así supimos que se había acoplado (en el buen sentido) con una catalana morenita con la que lo habíamos visto, muy animado, en el albergue cuando nos despedimos, y con ella había andado muchas jornadas.
A trancas y barrancas, Rafa consiguó su objetivo de acabar de un tirón. Cuando nos llamó desde Santiago, muy cansado pero emocionado, nos transmitió su ilusión, ya que todos, unos desde San Sebastian, otros desde Alicante, habíamos hecho fuerza para que lo lograra. Sentí mucha alegría cuando llegó y cierta envidia sana al no haber podido yo acompañarlo hasta el final.
Por él supimos que Miguel, el de Enguera, también había llegado pues se habían visto en la catedral. Miguel lo lograba por segundo año consecutivo. Cuando le envié un CD con todas mis fotos, tal y como hice con el resto, me envió una carta agradecido y sorprendido por el detalle. Lo curioso de aquella carta, es que estaba escrita y fechada en un area de servicio de una carretera de Cambridge (Inglaterra) en donde Miguel había parado a descansar, sin duda en medio de unos de sus transportes de frutas, pero que denotaban que no solo se acordaba del Camino, sino de sus amigos, al igual que los hacíamos el resto del equipo.
Tanto aquella mañana de mi regreso a casa, como en las semanas siguientes, cada vez que pensaba en aquellos días y en aquellas experiencias, sentía un bajón anímico. Cierta pena por tener que realizar la Ruta en tramos, teniendo que esperar un largo año para volver a ella.
Durante los meses siguientes fueron muchos los correos electrónicos y llamadas telefónicas con los compañeros, entre los que no hay que olvidar a granadinas y ovetenses, incluso con el escocés, con lo que seguíamos en contacto unos con otros, lo que propició varios reencuentros durante aquel año.

miércoles, 20 de febrero de 2008

Al Camino en el Puente de Mayo

En mi calidad de Costalero en Semana Santa, y acercándose su celebración, me veo ya inmerso en infinidad de actos y reuniones con el fin de ir perfilando la procesión.
En una de estas reuniones, una de Costaleros de mi Trono, el Cristo de la Caida, algunos de mis compañeros me propusieron la idea de elaborar un proyecto de viaje al Camino con ellos. La idea que pronto me surgió fue la de realizar el tramo comprendido entre Roncesvalles y Pamplona. Los motivos: Debería hacerse aprovechando un puente entre festivos. Deberían ser unas etapas lo suficientemente atractívas como para impactar a unos neófitos en el tema, con lo que los bosques y pueblos de Navarra cumplirían con creces este objetivo. Acabar en una capital como Pamplona, y poder visitarla con algo de tiempo añadía alicientes a la posible escapada. Por ser novatos y poco preparados, proyecté etapas cortas de apenas 15 Kms. cada día, o lo que es lo mismo, realizar en tres días un tramo que las quias señalan realizar en dos. De este modo cualquier persona puede realizar esta aventura sin cansarse apenas.
Salvo el viaje de Pamplona a Roncesvalles, que entraña algun problemilla logístico, sobre todo de tiempo, el trayecto en autobús Alicante-Pamplona, con su consiguiente regreso, es el mas rápido y directo. Y si se diera el caso de que alguno de ellos quedara enganchado a este maravilloso Camino, ya tendría hechas las dos primeras etapas del Camino Francés en España, y solo sería cuestión de que continuara mas adelante.
El puente elegido sería el del 1º de Mayo, con salida la vispera por la noche con el Billman Bus. El Camino en esa época de la primavera, aunque ya masificado, nos permitiría andar con previsible buen tiempo, aunque en el Pirineo eso nunca es una garantía. Aunque pensaba haber proyectado bien la pequeña aventura, tenía mis dudas ante la aceptación del viaje entre mis compañeros, aunque la idea, igualmente era de que el grupo no debería ser excesivamente numerosos, a lo sumo cuatro o cinco personas.
Pero lo que realmente me alegró mas fue que, en la reunión celebrada anoche mismo, varios compañeros se apuntaron de inmediato. Gente que yo no imaginaba a priori que pudiera interesar este tipo de viaje.
Desde luego se trata de una excelente oportunidad de conocer El Camino, y palpar el ambiente que se vive en él, no solo a nivel de paisajes, arte y demas, sino de conocer peregrinos en plena Ruta, pues la idea es pernoctar al menos una noche en un albergue. Una oportunidad de conocer qué es eso del Camino a Santiago en primera persona, con unos recorridos cortitos y llevaderos y en muy pocos días de marchas.
Por tanto, ahí me teneis... de nuevo embarcado en otra aventura del Camino... por algo soy un peregrino ¿no? Seguirán noticias próximamente del desarrollo de este proyecto... y si alguno de mis lectores se anima y quiere apuntarse... será muy bien admitido y recibido.

martes, 19 de febrero de 2008

Viaje de vuelta

A la hora prevista el bus llegó a la estación. Subí juntamente con dos o tres matrimonios de jubilados (que debían ir a sus apartamentos de la Manga del Mar Menor), y cuando reparé en el asiento que me correspondía resultó que, la butaca de al lado estaba ocupada por un china jovencita (esta debía ir a trabajar a una tienda todo a cien, también en La Manga, ... supuse...) ! No tengo remedio, "mardita sea mi suerte" ¡ siempre viajando con los tipos mas raros del pasaje. En el viaje de ida con Mohamed, el moruno y presunto terrorista suicida, y ahora en el de vuelta con una chinita de ojos rasgados.
Sin tiempo casi para aposentarme, el bus arrancó y pronto dejamos atras las calles de Logroño enfilando la autovía e iniciando así las nueve horas de viaje que tenia por delante.
La pelicula de video era una bazofia, la chinita pasaba de todo y de todos, los jubilados fueron quedándose dormidos unos tras otros tras la parada, con lo que yo me dediqué a dejar volar los pensamientos y recapitulándo con todo lo acontecido en aquellos días. Sin duda que la primera etapa en Roncesvalles, había sido una de las mas bonitas de mis aún cortas estancias en el Camino. Supongo que la anterior, la de la subida desde Saint Jean Pied-de-Port, también debía ser soberbia pero sin duda mucho mas dificultosa y exigente. También era consciente de que etapas como aquellas, salvo las de los bosques de Galicia, habían tocado a su fin, y que los paisajes en adelante, salvo honrosas excepciones, estarían faltos de esos bosques que tanto me apasionaban.
Pamplona me había gustado mucho, a pesar de que una tarde de domingo suponía poca actividad en las calles y tiendas y comercios cerrados. De Zubiri prefiero no recordar nada, pero no así de la infinidad de pequeños pueblecitos de sabor vasco navarro por los que habíamos pasado. Luego, la subida al Perdón había estado genial, casi irrepetible por las sensaciones que despertaba. Puente La Reina, Estella y Viana no habían defraudado las espectativas iniciales y había sido una gozada disfrutar de su arte, su arquitectura y su historia. Y para completar aquella aventura, pueblecitos desconocidos para mi, como Cirauqui, Torres del Rio o Los Arcos, me habían impactado gratamente, unos por su aspecto netamente medieval otros por la sorpresa de encontrar en ellos tal cantidad de riqueza cultural y artistica.
Las amistades hechas en aquellas jornadas no desmerecían para nada a las del año anterior, y sin duda habían servido para hacer de aquel tramo un exito rotundo. Un tramo del Camino que no hubiera sido igual de no conocer a aquellos buenos amigos.
Fansaeé durante un rato con la improbable posibilidad de juntar a todos ellos para una nueva aventura por la Ruta Jacobea, y mas aún, con poder caminar con María Dolores, mi mujer y compañera... pero aquello todavía debería esperar. Aún debería continuar con el trabajo de mentalización con ella, poco a poco, hablándole y contándole cosas de aquel Camino, sin agobiarla con exigencias, para que la idea fuera calando, y algún día me acompañara.
Y de pronto... me desperté en Gandia, cuando estaba a punto de amanecer.
Me había quedado dormido como un tronco, cuando el autobus arrancó de nuevo, después de su habitual parada en la provincia de Teruel. Con un reconfortante café con leche en el cuerpo, y sin duda cansado por la paliza de los 29 Kms. desde Los Arcos a Logroño, y luego la caminata entre sus calles, sin ni siquiera darme cuenta me había vencido el sueño. Sorprendente, pues yo nunca consigo conciliar el sueño en los viajes.

lunes, 18 de febrero de 2008

Despedida en Logroño

Contesto a Rafa de Almeria, explicándole que Rafa Gambin no hace el Camino. Se está aficionando en buscar noticias relacionadas con el tema, pero solo por mantener y mejorar el blog de su amigo el peregrino. Sin duda el almeriense se confunde con otro Rafa, Rafa Quero, el ovetense con el que coincidí y andé por Galicia en 2004 y que, efectivamente, hizo al año siguiente el Camino del Norte, o puede que fuera el Primitivo, que empieza en Oviedo.
También recibo "off the record" nuevas entregas, con nuevas etapas del diario de Rafa durante este pasado 2007. Los exámenes de Febrero me tenían huerfano de sus aventuras. Me leo de un tirón todo lo nuevo que me manda, esta vez sus días, y muchas de sus etílicas noches, desde Pamplona hasta Navarrete, ya en La Rioja. Y como las otras veces me quedó entusiasmado con todas sus peripecias y la cantidad y variedad de gentes que conoció por la ruta. Es cierto que se extiende mas cuando de chicas se trata, pero a todos retrata con ese humor que le caracteriza. Me quedo con ganas de que avance en la redacción de su diario... me quedo con ganas de mas en esa estupenda aventura y que tan bien cuenta.
También por correo recibo recomendaciones del otro Rafa, Gambin, indicándome como mejorar la apariencia de este blog y mejorarlo. En cuanto tenga oportunidad me meteré de lleno a ello y veremos que sale después.
Y continuo con mis ultimas horas en Logroño relatando como el matrimonio vasco, en compañia de Miguel el de Enguera y un servidor, acabamos cenando en un vetusto bar de una de las calles del caco antiguo de Logroño. La cena fue copiosa y tras ella permanecimos de tertulia un buen rato. Flotaba en el ambiente cierto aroma a despedida y era el momento de apresurar lo que había que decirnos. A mi me quedaba una hora escasa para marchar. Javier y Esperanza partían a la mañana siguiente de vuelta a San Sebastian. Solo Miguel y Rafa continuaban, y no parecía que fueran a hacerlo juntos, por tanto nuestros caminos, que se habían juntado en las proximidades de Roncesvalles, se separaban y no existía en aquellos momentos la certeza de que volvieramos a vernos. La amistad sin duda perduraría y el recuerdo sería difícil de olvidar.
Regresamos al albergue, donde encontramos al almeriense enfrascado en sus charlas con el resto de peregrinos. Aun tuvimos tiempo de hacernos todos juntos unas fotos junto a una talla de un peregrino en la planta baja del gran albergue. Una de ellas sale, un poco fotogénico Rafa, debido al sombrero que me lleva, en la que parece lo que en realidad no es.
Subimos todos hacia la habitación y repasamos nuestras notas de nuestros respectivas direcciones y teléfonos para mantenernos en contacto, todo ello mientras yo revisaba mi mochila y resto de equipaje para el viaje de vuelta.
El abrazo con un Miguel emocionado que no paraba de decir que siendo casi vecinos, era seguro que volveríamos a vernos... y que sin embargo, hasta la fecha, me he reencontrado con todos los demas, mucho mas lejanos, pero no con él. La despedida de Javier y Esperanza también muy sentida. Ellos no descartaban hacerme una visita, ya que estaban acostumbrados a ir a Benidorm donde durante varios años mantuvieron un apartamento. Y el fuerte abrazo con Rafa, al que ya estaba echando de menos con sus ocurrencias y sus chistes. Con el solo supe decirle, entrecortadamente, que no cambiara nunca, y que siguiera siendo como era... y él, lógicamente, me hizo caso y continua como en aquellos días, dicharachero, mordaz e irónico.
No diré que con lágrimas, pero si que con un profundo mal sabor de boca por tener que dejar el Camino cuando mejor lo estaba pasando, enfilé escaleras abajo, y ante la extrañeza de la hospitalera al ver a uno de sus huespedes abandonar el albergue, me dirijí hacia la estación de autobuses, que estaba relativamente cerca, y donde llegué con casi dos horas de adelanto sobre la hora prevista de salida de mi bus.
Allí pensé que, curiosamente, seis días antes cuando llegaba a Pamplona, no pensaba que encontraría amigos tan increibles como las tres granadinas o los tres ovetences del año anterior. Que nada mas echar a andar, en Roncesvalles, los había extrañado enormemente, seguro de que eran irrepetibles, inremplazables. Sin embargo, acababa de dejar atras a otras cuatro espléndidas personas, cada una con su forma de ser como es lógico, pero increibles tanto individualmente como en grupo.
Me dispuse a esperar sobre un banco, rodeado de "la creme de la creme" del tercer mundo, ya que varios inmigrantes magrebies, o bien esperaban algun autobús nocturno como yo, o bien debían pasar la noche en uno de los bancos de la estación, como improvisada alcoba particular.

domingo, 17 de febrero de 2008

A mis dos amigos Rafa

Abro mi correo del día y veo dos comentarios de mis amigos. Los Rafas.
El primero del de Almería, dando por terminado el tramo conmigo entre Navarra y Logroño. Desde luego aquellas etapas juntos tocan a su fin, es inevitable, pero aun has de aparecer por este blog muchas mas veces, sobre todo cuando relate nuestros reencuentros tanto en Almeria, Garrucha o Alicante. Y no falta mucho para la primera, y aquellos churros en el bar La Gloria frente a tu casa.
Resulta, que estando cercano el cementerio de Almería o de camino a el, a los dueños del bar se les ocurrió colocarle al establecimiento ese nombre. Así al ir o regresar del camposanto, puede uno hacer parada en la Gloria que sin duda es hacia donde van los finados. El juego de palabra es genial. Tanto como los churros que te sirven ahí.
Es curioso como congeniamos Rafa y yo desde el primer momento, los cortos días en el Camino, se complementaron luego con cotidianos correos, y mas tarde nos hemos vuelto a ver en diferentes ocasiones, siempre que ha sido posible, aunque ello equivaliera a desviarme varios cientos de kilómetros para un encuentro de solo unos pocos minutos. Todo ello contribuyó a cimentar una sincera amistad. Sin duda un tipo interesante este Rafa. Simpático, ocurrente y bonachón, de fácil trato. Lo que se dice un Amigo.
Con el correo de Rafa Gambín me llevo una agradabla sorpresa. Resulta que ha publicado en su comentario la noticia completa del peregrino enamorado de la chica de León. Totalmente diferente a como me la contaron, (mal contada y sin matices,) con lo que me la había imaginado de forma distinta a como era, y así me salió la entrada del viernes.
Pero lo que mas me alegra es que Rafa ha reiniciado su blog. Inmediatamente lo he colocado entre mis favoritos, el de vivirconcancer. Mi propio blog surgió a raiz de una conversación con mi amigo que, inmerso en una grave enfermedad, con el lógico tiempo libre entre operación y operación, se había iniciado en esto de los blogs, y relataba, como su titulo inequívocamente expresa, como era su vida en aquellos difíciles momentos. La temática del blog era cuanto menos dura. No solo de leer, sino que imagino, complicada de desarrollar con aquella espada de Damocles pendiendo en lo alto.
De todo esto hace precisamente un año este mes de Febrero. El blog se dejó a un lado, a medida que la enfermedad quedaba felizmente atras. Sin duda regresar sobre un tema que se debía olvidar cuanto antes influyó. Pero sirvió para que el me animara a escribir este que vosotros leis ahora.
Rafa, consiguió dejar atras el indescriptible susto, yo creo firmemente que gracias a su tremendo espiritu de luchador y a su positivismo como modo de vida (Aun lo recuerdo en la habitación del hospital vispera de su primera intervención en el cerebro, vestido con la camiseta del Real Madrid antes de un partido por la tele, y diciendo "Este partido lo vamos a ganar"... y no se refería al partido de la tele, sino a la lucha que debería mantener con el dichoso cancer durante los siguientes meses...!!! y vaya si ganó el partido¡¡¡ Por goleada... con auténticos "sietes" en la cabeza y el pecho, con un cacho de pulmón menos... pero ganado el partido)
El caso es que ayer me di cuenta de que ha vuelto a escribir en el blog. Ha mantenido el titulo, eso si, pero la temática es muy diferente. Pequeñas entradas, de a veces solo una frase, pero cualquiera que entre podrá notar ese positivismo del que yo hablaba. Lo que mas me llama la atención, es la forma en que ha diseñado su bitácora. Muy colorista, con muchas fotos y pegatinas, muy activa con varios elementos en constante movimiento. Con infinidad de elementos útiles y con la novedad de que se escucha música nada mas entrar, rock sobre todo, pero con grupos y canciones de los de toda la vida. Y además una sección titulada "¿Tiene que ver algo, o no?" en la que se incluyen noticias, curiosamente, del camino de santiago actualmente.
Hacía tiempo que quería escribir sobre estos dos amigos mios. Han sido solo unas pocas líneas sobre todo lo bueno que podría contar de ellos, pero sirve para mi pequeño homenaje a dos grandes personas. A DOS AMIGOS.

viernes, 15 de febrero de 2008

Misceláneas

Con bastante trabajo, he conseguido añadir en Picasa nuevos albumes de fotos. Algo mas de 500 nuevas fotografías, que comprenden en su mayoría las del tramo del año 2007 entre Burgos y León. También he subido fotos de los Concursos fotógraficos, el V y el VI, organizados por la Asociación de Amigos del Camino en Alicante, tanto en el año 2006 como este 2007. Así como su utilización en otras exposiciones de otras localidades, que a petición de sus ayuntamientos fueron dejadas durante un tiempo, y en las que coincidimos en algunas etapas del Camino del Sureste. Finalmente en ese mismo albúm pueden verse mis fotografías presentadas al Concurso, con su lema o título correspondiente. El primer año en que participé, presenté 4 de las cuarenta que entraron a exposición. El segundo año, este 2007, mandé 5 pero esta vez fueron mas de ochenta las presentadas, dando muestras así de que esta iniciativa de la asociación cada año tiene mejor acogida. Nunca he ganado, pero mi premio gordo fue que en la última revista publicada por la Asociación, antes de estas Navidades pasadas, el tema monográfico que trataba, El Camino del Sureste y sus etapas realizadas, venía totalmente documentado por mas de veinte fotos mías. De cualquier manera, si algún año consigo alguno de los diferentes premios, normalmente premios en metálico, tengo pensamiento de donar la cantidad que me corresponda a la propia asociación, que siempre anda necesitada de dinero para organizar salidas al camino, editar su revista y promover algunos actos públicos. El dinero solo entra por medio de donativos y cuotas de socios, pero con apenas 300 miembros de pago, y con una cuota anual de solo 29 € no pueden hacerse muchos milagros. Gracias a Dios, que desde el pasado mes de Octubre, el ayuntamiento ha ubicado a la asociación en un centro municipal, a dos pasos del Corte Ingles y de maisonave, donde se agrupan y conviven otras asociaciones, tan variopintas como una de mujeres practicantes y amantes del noble arte del macramé, otra de talleres ceramistas, y una asociación juvenil y del voluntariado. La oficina actual es de reducidas dimensiones, pero suficientes para tener un par de ordenadores para trabajos de secretaría y atender a los peregrinos que vienen a por sus credenciales antes de partir hacia el Camino. Ahorramos así los gastos de alquiler del anterior local, del que tuvimos que irnos ya que el dueño iba a vender para edificar, y tambien ahorramos los gastos de luz y limpieza que corren a cargo del ayuntamiento.
Y se me ocurre que mis lectores podrían hacerme llegar de alguna manera sus fotos preferidas de mis albumes, con lo que tendría una idea de cuales son las que mas gustan o estan mejores, y poder presentarla el año que viene. Sabiendo que la temática ha de ser exlusivamente la peregrinación a Santiago por cualquiera de sus caminos y que las fotos no pueden ser montajes o estar retocadas con programas informáticos. Espero vuestras sugerencias.
Y como de una miscelanea trata esta entrada, comentaré lo acontecido en un programa de televisión de hace un par de día, concretamente de la Primera Cadena de TVE y en su programa Gentes. Trataba de un peregrino que en el tramo comprendido entre León y Santiago, en una de sus etapas, había coincidido y entablado conversación con una peregrina. Hasta ahí nada anormal. Un par de personas que se conocen en un momento de descanso, tal vez en algún bar, hablan unos momentos y cada uno despues sigue su camino.
El caso es que nuestro hombre, pasados unos kilómetros se dá cuenta de que se ha enamorado perdídamente de la chica. Trata de volver a encontrarla durante los siguientes días pero infructuosamente. Nunca mas la vuelve a ver, con lo que "sufre en silencio" su desesperanza.
Pero hete ahí, que el tio tiene una idea. Supongo que acostumbrado a ver cantidad de programas de televisión del tipo Diario de Patricia, Las Tardes con... su puta madre, etc... y viendo que cualquier gilipollas, eso sí, sin sentido del ridículo, llama al programa y de pronto le encuentran a sus padres que no ve desde hace teinta años, a su hermano gemelo vendido en su día a una troupe de gitanos circenses, o al novio aquel que me pegaba sus buenas palizas pero del que no puedo vivir sin él... y sin mas explica al programa con detalle su aflicción.
Sin mas datos que la fecha en que sintió renacer el amor, el lugar en que se produjo el fugaz encuentro y datos físicos de la chica... bajita, rubita, con ojos azules preciosos, etc... el muy cabrón consigue que los tipos de la televisión encuentren a la chavala. ¿Como lo hicieron? Pues no lo sé. El caso es que se la encuentran y le preparan una cita en la ciudad en que vive ella. A todo esto... la chica ni idea de que va levantando pasiones por el Camino, pero no obstante la muy ladina, accede en principio al juego pero manda a un grupo de sus amigas a esperar a nuestro peregrino a la estación. No sea que el tio fuera un cranco, un viejo o vaya usted a saber qué. Como el tio, a primera vista, no es ni lo uno ni lo otro... solo puede ser un "vaya usted a saber qué" o el principe azul.
Finalmente las imagenes televisivas ofrecen a la feliz pareja reencontrada (la chavala ni se acordaba del tipo... pero si con eso salgo en la tele,... pues vale...) ambos paseando cogidos ya de la mano... !"coño, y pá que vamo a esperar"¡.
Resumiendo: Cualquier gilipollas puede ir al Camino de Santiago... pero, ! ojo eh, ¡ que este es un gilipollas con suerte. Con lo que debo reconvertir aquella opinión mía de los primeros días de este blog, en la que decía que el Camino de Santiago no era la romería del Rocio, con "su polvo del camino" (aquí puede entenderse por la vulgar acepción de la palabra "polvo") Resulta que va ha tener razon Rafa, el almeriense, cuando contestaba que en el Camino se podía ligar.
Un mito se me cae de golpe. Ya resulta que hasta en el Camino de Santiago cuecen habas... y yo como un bobo sin saberlo. De nuevo me viene una expresión utilizada ya otras veces: ! Señor, qué cruz ¡ Si el Apóstol y Amery Picaud levantaran la cabeza...

jueves, 14 de febrero de 2008

Tarde de visita turística

Antes de iniciar la entrada de hoy, dar la bienvenida a Manolo, buen amigo que recientemente ha descubierto este blog y promete acercarse de cuando en cuando para leerlo, siempre y cuando Marisol, su simpática mujer, se lo permita . Ademas Manolo me comenta que esta interesado en realizar algunas etapas del Camino a Santiago. Incluso me pregunta las fechas de mi tramo de este año 2008 y se interesa por una pequeña salida de solo 3 días que tenemos proyectada, juntamente con algunos compañeros de mi Hermandad, para el puente del 1 de Mayo y que, si todo va bien, nos llevaría de Roncesvalles a Pamplona. Para mi sería una alegría tremenda poder andar con Manolo, que pudieramos coincidir. Es una persona de la que se suele llamar "verdadero amigo". Y ademas le vendría muy bien para adelgazar tras una molesta enfermedad tratada con cortisona que lo ha dejado algo hinchado.
Y continuando con mi relato... allá que nos fuimos, Rafa, Javier y yo, a tomar un café. Nos adentramos por las callejuelas cercanas al albergue hasta encontrar un precioso cafe-pub en la plaza de los Chapiteles. Atendían la barra dos jovencitas muy monas pero extranjeras, lo que reanimó momentáneamente a Rafa que intentó un primer acercamiento preguntandoles por la música que tenían sintonizada las chicas, una mezcla de "Chili out" y jazz muy suave.
Comentamos entre nosotros la etapa y las impresiones del albergue asi como mis intenciones de aprovechar las pocas horas que me quedaban por pasar con ellos en Logroño. Mi autobús salía a las 23,30 y quería estar en la estación con tiempo de sobra, no fuera que volviera a perderlo como seis días antes. Rafa, que había perdido cierto interés por aquellas extranjeras que no reconocían el fino humor andaluz que el intentaba desplegarles, galantemente, eso sí, prefería regresar al albergue y descansar las piernas. Javier pensaba que debería esperar que su mujer se levantara para realizar la visita, pues en caso contrario habría de realizarla dos veces.
Con lo que me despedí de ellos, y salí por otra puerta que tenía el bar y que daba a la peatonal calle Portales, una de las calles importantes de la ciudad pues en ella estaba situada la Catedral.
Debería comprar algunos regalos para llevar a casa, por lo que empecé mirando escaparates por ver de inspirarme en tan dificultosa tarea, y compré un buen surtido de caramelos Solano en la tienda que la casa matriz de la marca tenía en Logroño desde hacía una pila de años.
Me dí, en un par de horas, una caminata impresionante, curioseando las tiendas, mirando las casas y empapándome de aquella ciudad que anteriormente no conocía. Llegué hasta la plaza del Alferez provisional y el palacio de la Diputación, donde visité una exposición de cuadros. Regresé por Bretón de los Herreros, y de allí hasta El Espolón o la Plaza del Principe de Vergara, una famosa plaza, grande y muy cuidada, donde se encuentra la estatua del general Espartero y su no menos famoso caballo, que según el vulgo, estaba dotado de impresionantes atributos. En la Plaza de la Paz hice algunas compras y visité el Mercado de Abastos, curiosamente abierto por la tarde. De allí, a la cercana calle Laurel, famosa en toda España por sus tascas y sus pinchos, pero dada la hora todas estaban cerradas, pero podía ser una buena idea cenar en cualquiera de ellas mas tarde.
Compré mis decimos de lotería de Navidad. (Esta vez, y sin que sirva de precedente, me tocaron 100 € de la pedrea, cantidad que ingresé en el banco para disponer de ella en mi próximo tramo)
Por la Plaza del Mercado, pegada a la Catedral y en la que una televisión local retransmitía un programa de karaoke callejero, al estilo de como solía hacer Canal Nou, seguramente un acto mas de las cercanas fiestas patronales de Logroño, siempre al final de la vendimia, y de allí llegué de nuevo al albergue. Allí me encontré con Rafa, que sentado en la terraza ajardinada, charlaba animadamente con un numeroso grupo de jóvenes peregrinos, de los que reconocí a muchos, encontrados en la ruta los días precedentes. Me indicó que Javier y Esperanza habían salido para hacer su propia visita a Logroño, con lo que decidí dejar al matrimonio a su bola y unirme a la tertulia, esperando que el hambre y la hora de la cena llegaran.

martes, 12 de febrero de 2008

Un paseo ya hasta Logroño

Al ver a Rafa recogimos rápido nuestra basura como buenos peregrinos, para depositarla en algún contenedor que encontráramos por la ruta. Si bién acabábamos de realizar algo no muy recomendable, como era sentarse sobre unas matas de hierba resecas, con el peligro de que algún insecto no deseado se nos pegara a las ropas o las mochilas, y lo transportáramos hasta el albergue. Así es como se producen cada cierto tiempo algunas plagas, sobre todo chinches y pulgas, tan peligrosas y desagradables. No es por la falta de higiene de los caminantes. Al contrario. Creo que no hay ningún peregrino que no sueñe con una buena ducha al llegar a su destino, incluso si es con un agua congelada como en Estella, a pesar de que dicen "por ahí" que puede provocar impotencia. Gracias a Dios, a las Asociaciones y a los hospitaleros, cada cierto tiempo se desinfectan los albergues. Fundas de colchones, almohadas y mantas pasan por las lavanderías para desparasitar a conciencia. Un destino mas a tener en cuenta, cuando se nos cobra por pernoctar en ellos. Aun así, desgraciadamente, de cuando en cuando puede verse a algún peregrino picado por chinches, lo que dá un aspecto negativo a nuestro Camino.
Continuamos durante un corto trecho hasta llegar al límite de la provincias de Navarra y La Rioja, justo a la altura de un pequeño puente de madera junto a la fábrica de la papelera Ebro y a la carretera Nacional que de nuevo tuvimos que cruzar.
En aquel punto estabamos solo a cuatro kilómetros de la capital riojana, y a poco mas de 10 de Oyón el primer pueblo de la provincia de Alava, según me informó Javier como buen vasco.
Ascendimos el monte Cantabría, una pequeña tachuela en el sendero, y fuimos rebasados por un ciclista italiano al que el donostiarra saludó con un "Forza Pantani" lo que provocó un estado de gloriosa exaltación patriótica en el ciclista que renovó sus fuerzas y siguió con mas brío su subida.
Desde lo mas alto tuvimos Logroño a la vista lo que nos empezó a dar alas viendo el final de los 29 Kms. de aquella etapa.
En la bajada debimos pasar frente a la casa de doña Felisa, aunque no nos dimos cuenta de ello. Esta mujer, fallecida en el año 2002, era un personaje entrañable de los que pasan a la historia del Camino. Se entretenía sellando las credenciales de todos aquellos que pasaban por su porche y a muchos les regalaba higos que cultivaba en su jardín.
Tras pasar por delante del muro de un cementerio, tuvimos el Ebro ante nuestra vista. La ribera estaba flanqueada por inumerables árboles y mucha vegetación. Corría el rio con un agua marrón pero abundante para el mes de Septiembre, y lo fuimos siguiendo hasta llegar a las inmediaciones del Puente de Piedra, ya en pleno casco urbano de la capital.
Allí nos entretuvimos haciendonos fotos ante un monumento a los peregrinos, con mucha similitúd al de los Peregrinos Ilustres de la entrada a Santiago. Cada uno de nosotros fue colocando su mano en la huella que tenía el enorme pilar de hormigón, mientras el compañero inmortalizaba el momento.
Cruzamos el puente, y pudimos apreciar la gran anchura del rio. Valencianos y almerienses no estamos acostumbrados a ver correr tanta agua dulce junta. Todo lo más, la salada de nuestro Mediterráneo. Al menos a mi me impresionó sus dimensiones.
Una vez salvado el puente no tuvimos que andar mucho, ya que la Ruavieja, calle típicamente jacobea y donde estaba situado el albergue de peregrinos, estaba a pocos pasos.
Entramos en el cuidado albergue y nos dieron cama en el segundo piso. Yo pagué a pesar de que no iba a utilizar la cama esa noche, pero no iba a perdonar la ducha. Y hacia allí nos dirigimos, debo reconocer que renqueantes, con las piernas bastante cansadas y cargadas. En la ducha, de agua caliente esta vez, me encontré con un bote de champú olvidado por alguno, y en el lado negativo, que el agua disolvió los dos colgantes con símbolos celtas comprados en Torres del Rio que llevaba al cuello. Sin duda los argentinos no bañaban con excesivo esmalte sus artesanías, con lo que Alvarito se quedaba sin regalos celtas.
Cambiado y relajado, decidí hacer cuanto antes la visita turística, previo cortado descafeinado, pues eran casi las cuatro de la tarde. Me acompañaron Javier y Rafa, ya que Esperanza y Miguel, cansadisimos, cogieron la cama con intenciones de una larga siesta.

lunes, 11 de febrero de 2008

Menos cachondeo

Detecto cierto cachondeito con La Amante del Camino.
La chica acabará cansándose de nuestros chistes y dejará de hacer comentarios. Yo lo haría.
Además, es mi mente calenturienta la que ha montado todo ese tinglado, y ella solo se ha visto inmersa en él por casualidad. Diría mas... el que quiera para si "amantes del camino"... que escriba su propio blog. Pensándolo bien no estaría del todo mal, y los poquitos que leen este, podrían conocer otro punto de vista, otras viviencias diferentes... incluso tal vez una otra forma de comer percebes. ¿Quién sabe?
La entrada de Cesar Borgia que, vuelta a leer me resultó larga e indigesta por lo que prometo no volver a hacerlo, es sin embargo la que ha tenido mas comentarios. Cuatro de golpe. Lo nunca visto. Estoy pensando escribir largo y tendido sobre Lucrecia Borgia. ! Es broma ¡.
Pero continuemos con el relato de mi camino... Acabábamos de salir de la iglesia y pisoteado una lápida con varios siglos de historia, cuando reparé en las compras de Esperanza, y temiéndome una nueva comida a base de bocadillos, como así resultó mas tarde, pensé en tomarme antes un aperitivo mas sustancioso. Me acompañó Rafa, que por fin había salido de su momentáneo trance. Elegimos un bar junto al ayuntamiento y nos comimos una rica ensaladilla rusa, servida por una despampanante camarera, y al almeriense se le ocurrió que bien podía quedarse unas horas mas admirando a la belleza local por lo que, acabado el rápido refrigerio, me dijo que se quedaba en Viana y que ya nos alcanzaría en Logroño. Con que allí se quedó intentando ligar.
El resto del grupo reiniciamos la marcha y fuimos saliendo del pueblo bajando por unas estrechas y bonitas calles que nos llevaron a una zona de huertas, y mas adelante a cruzar con algo de peligro una carretera Nacional.
Durante aproximadamente una hora anduvimos por una vía asfaltada hasta que llegamos a la ermita de la Virgen de las Cuevas, que era la patrona de Viana pero estaba cerrada a cal y canto.
Siguiendo ya un sendero de tierra entre numerosos viñedos llegamos hasta la Laguna de las Cañas, un espacio protegido para descanso de aves migratorias, pero la "pertinaz sequía" había hecho estragos... y ni laguna ni aves migratorias... un secarral lleno de arbustos y ni una gota de agua. A poca distancia había un pinar justo al borde de unos campos de cultivos en barbecho. Aquella era la única sombra que habíamos visto desde la salida de Viana, y Esperanza propuso detenernos junto a los árboles y comer los bocatas, y como no hubo oposición, así lo hicimos. Nos desviamos del sendero unos centenares de metros hasta el bosquecillo, dejando caer nuestros cansados culos en aquel pinar sobre unas matas de hierbas resecas. No era el mejor sitio para comer pero al menos estabamos a resguardo del sofocante sol.
Empezamos con la comida viendo como iban desfilando los peregrinos por el camino, y cuando ya estabamos en los postres, a lo lejos vimos como en Sansol, de nuevo a los dos peregrinos franceses ataviados con sus pañuelos palestinos, y de nuevo, a voz en grito los saludé con el "Salan al i kum" de por la mañana, y reconociéndome me devolvieron el saludo. Algo mas tarde, tres jovenes caminantes, uno de ellos con una especie de pluma altísima prendida de su sombrero aparecieron a lo lejos. A medida que avanzaban fuimos reconociendo por la forma de andar o cojear a nuestro Rafa, que se había agrupado a aquellos dos jóvenes, creo que mexicanos o portoriqueños.
El almeriense sin duda iba buscando nueva compañía para continuar la ruta, consciente de que tanto a los vascos como a mi mismo nos quedaban pocas horas para abandonar el Camino.

sábado, 9 de febrero de 2008

Cesar Borgia

Aquella lápida de mármol, a la que yo había echado el ojo para mi amigo Rafa que estaba para pocas explicaciones de Arte e Historia aquel día, señalaba el lugar en el que está enterrado Cesar Borgia.
Nos pareció extraño, solo por nuestra total ignorancia, por nuestra falta de cultura, que un personaje que había vivido en la Italia renacentista, a pesar del origen valenciano de su famosa familia, hubiera acabado sus días en aquel pueblo navarro. Mas tarde, pasadas unas semanas y ya en casa, la curiosidad me llevó a indagar sobre su biografía. Debo reconocer que quedé cautivado por el personaje.
Cesar nació en Roma, en 1.475 hijo natural del cardenal Rodrigo Borja y una cortesana italiana(mas tarde el valenciano italianizó su apellido, y ascendió al papado con el nombre de Alejandro VI). A los 16 años Cesar fue nombrado obispo de Pamplona y un año mas tarde, en Agosto de 1.492, arzobispo de Valencia y cardenal de la Curia. Su espíritu batallador lo llevó mas tarde a abandonar el cardenalato para convertirse en capitán de las tropas vaticanas, consiguiendo conquistar innumerables ciudades y ducados italianos, ayudado por los Reyes de Francia, en aras de la ambición paterna de unificar la totalidad de la península transalpina bajo la bandera del Vaticano.
El declive de aquel pequeño embrión de imperio por el que lucharon los Borgias sobrevino, años mas tarde, a la muerte de su padre el Papa, se cree que envenenado por sus enemigos, Cesar entonces cayó en desgracia y acabó derrotado y apresado en una batalla contra los españoles en un intento de arrebatarles Napoles. Precisamente fue D. Gonzalo Fernandez de Cordoba, El Gran Capitán quien lo apresa y lo lleva a España, donde pasa en las mazmorras de diferentes castillos algunos años. Pero finalmente consigue escapar y refugiarse en Navarra, de la que fue obispo y se une al Rey Juan de Albret, su cuñado, en lucha contra otros nobles. Lo nombra capitán general de su ejercito y cuando pone sitio a Viana, de la que había conquistado la villa pero no así el castillo, en una escaramuza del combate, muere de un lanzazo, el día 11 de Marzo de 1.507 a la edad de 31 años.
Parece mentira que a esa edad ya hubiera vivido una vida tan intensa. Político habilidoso, gran estratega, pero en general de procedimientos muy sangrientos y tortuosos, tiene su propia leyenda negra, que no me cabe duda, es cierta aunque con matices. Fruto de ella es la posible relación sentimental con su hermana, la no menos famosa Lucrecia, o su relación con el asesinato de otro de sus hermanos, Juan. Coetáneo de personajes como Los Medicis y los Sforza, a Catalina Sforza la mantuvo presa en Roma durante varios años, coetáneo igualmente de los Reyes Católicos, de Cristobal Colón y el descubrimiento de America, de Leonardo Da Vinci, y de otro personaje ilustre con el que entabla amistad durante un periodo de tiempo, Maquiavelo, quien se inspiró en la figura de Cesar para escribir su obra El Principe.
Muerto Cesar Borgia, es enterrado en la iglesia de Santa María donde su cuñado el Rey ordena construirle un mausoleo fastuoso.
Pero en el siglo XVI un obispo de Calahorra considerándo sacrilegio la permanencia de los restos de un personaje tan controvertido en lugar sagrado, mandó sacarlos y enterrarlos en plena Rua Mayor frente a la iglesia: "Para que en pago de sus muchas culpas le pisoteen los hombres y las bestias"
Deberán pasar 300 años para que en 1884 se exhumen sus restos y pasen a un mausoleo erigido a la entrada del Ayuntamiento de Viana. Pero esta nueva sepultura queda destruida durante nuestra Guerra Civil. En 1.945 de nuevo son rescatados y depositados los restos en el lugar actual, la lápida de mármol blanca en la misma puerta y fachada renacentista de la Iglesia de Santa María. Hasta que llegamos nosotros, en Septiembre de 2.005 para hacer inconscientemente lo que pedía el de Calahorra ("para que la pisen hombre y bestias",... sin ir mas lejos,... Javier y Alberto... y por ese orden)
En la lápida puede leerse: "Cesar Borgia, generalísimo de los ejercitos de Navarra y Pontificios, muerto en los campos de Viana el XI de marzo de MDVII"
A pesar de ser un personaje muchas veces cruel y atormentado, con claroscuros, a mi me impresionó conocer en detalle su apasionante vida. Tengo dos o tres libros sobre el, y la reciente pelicula sobre su figura y familia. Uno de los libros, el de Umberto Eco, que se centra mayormente en relatar como esta es, a su juicio, la "Primera Familia de la Mafia". Y puede que no le falte razón al hombre.
Tiene pués su persona, tantos detractores como seguidores. Entre estos últimos no me resisto a transcribir aqui un poema del erudito obispo de Mondoñedo que en sus "Epístolas Familiares" escribía en 1.523 ante la tumba de Cesar Borgia lo siguiente: " Aquí yace en poca tierra, el que toda le temía, él que la paz y la guerra en su mano tenía. ! Oh tu, que vas a buscar dignas cosas que loar ¡ Si tu loas lo mas digno aquí pare tu camino, no cures de mas andar ". Cesar Borgia es toda una celebridad en Viana, a tal punto que existe en una de sus plazas un busto suyo de cobre, al que, cuando años atras Miguel Indurain ganaba sus Tours de Francia, se vestía a la escultura con un maillot amarillo.

viernes, 8 de febrero de 2008

Toboganes hasta Viana

Cuando salíamos de Torres del Rio, ya de nuevo reunificados, recibí una de las diarias llamadas de MD. En ella mi señora me informaba de que en el último libro de Miguel Delibes, La tierra herida escrito conjuntamente con su hijo, el escritor vallisoletano siempre amante de la naturaleza, el campo, la caza y la pesca, y especialmente sensibilizado con los problemas de la ecología y los derivados del tan cacareado cambio climatico, hacía un sesudo repaso del problemadel medio ambiente en España, y en una de sus paginas, la 69 concretamente, nombraba a mi cuñado el meteorologo alabando el último libro de este y el trabajo que desarrolla en su Catedra de Climatología Regional de la Universidad de Alicante. Transmití a mis compañeros de viaje tal efeméride, a mayor gloria de Jorge y exaltación del ego de MªDolores, su hermana.
Ya decididamente inmersos en un mar de cepas de uvas... se notaba que nos acercabamos a La Rioja, y con Esperanza haciendo acopio de algún que otro racimo para los postres de nuestros almuerzos, y para compensar el peso de su bolsa de endrinas, que llevaba a cuestas desde hacia mas de 5 días, avanzabamos aduras penas por un continuo sube y baja, una montaña rusa pedregosa y polvorienta, que nos iba machacando las piernas. Los mas enteros, Javier y Miguel, este exultante y mas hablador que nunca, señal de que le había sentado bien el madrugón de la mañana. Yo charlando con Esperanza, o mejor dicho, yo atendiendo a sus comentarios ya que ella cuando se ponía a hablar no dejaba al resto colocar ni una frase. Y Rafa, con pocas ganas de chistes aquel día quedandose poco a poco atras pero a su ritmo.
Pronto pasamos por precioso pinar y nada mas salir de él por la ermita de la Virgen del Poyo.
Los toboganes fueron una constante hasta las proximidades de Viana. Fueron diez kilometros, que realizamos en mas de 2 horas, realmente agotadores y algo aburridos, sobre todo cuando cruzamos una zona de barrancos que le daban a la ruta un aspecto desolador y solitario.
Llegada a Viana con cruce peligroso de la carretera a la altura de unos inmensos silos y, como no, subida hasta lo mas alto del pueblo, por calles empinadas y con poco tráfico. Cuando alcanzamos la calle Mayor y la plaza de los Fueros, vimos los innumerables palacios barrocos y casas blasonadas con preciosas balconadas de hierros forjados, que le daban a la localidad ese aspecto de regio abolengo que solo las ciudades con historia pueden tener. Mucha gente por las calles e infinidad de peregrinos que, o bien elegían Viana como final de etapa, o se daban un merecido descanso a mitad de una etapa de 29 Kms. si como nosotros seguían hasta Logroño.
Cada uno se dedicó a lo suyo. Miguel a charlar con unos jubiletas que tomaban el sol en la plaza. Esperanza a comprar pan y otras vituallas para dar de comer a "su prole". Javier y yo inmediatamente a visitar la Ex-colegiata de Santa María de Viana. En cuanto a Rafa, una vez hubo llegado, se dejó caer en los bancos de piedra que rodeaban el exterior de la Iglesia y allí se quedó acurrucado en posición fetal.
De Santa María decir que era una seo impresionante. Grande, cuidadisima, luminosa, con mas de once capillas todas ellas dedicadas a sus correspondientes santos o virgenes, y algunas claramente procesionales en la Semana Santa. Con estas últimas me interesé especialmente dedicándoles mas tiempo, como cofrade de una hermandad, como secretario y Costalero del Trono del Cristo de la Caída en Alicante, siempre estoy atento a como se desarolla la Semana Santa en otras localidades, para conocer, aprender y tratar de descubrir alguna cosa interesante que poder aprovechar e incorporar a nuestra propia estación de penitencia del Jueves Santo.
Compré el libro de aquella iglesia, casi catedral, hojeándolo por encima, y tras rezar una corta plegaria salí de nuevo al exterior con Javier. Al hacerlo reparamos justo en la puerta de entrada en una lápida de marmol blanco con inscripción. Sin duda el lugar de enterramiento de un personaje ilustre. Desconocedores de la Historia, habíamos entrado, incluso pisándola distraidamente, sin fijarnos que aquel mismo sitio había sido la sepultura de uno de los personajes mas distinguidos y atractivos, enigmaticos y también de los mas controvertidos, del siglo XV. En aquel momento, y desde aquel lugar viendo a Rafa en un estado lamentable, roto, casi muerto, solo se me ocurrió pensar que era buen sitio para enterrarlo caso de producirse el fatal desenlace que su postura y expresión facial hacían presagiar.

jueves, 7 de febrero de 2008

Nuevas fotos en Picassa

Entro en el blog para avisar de que he colgado nuevas fotografías y !!! oh, sorpresa ¡¡¡ me encuentro con un comentario de La Amante del Camino.
Antes de nada decirte que caso de que seas un gordo seboso... tienes muy mala sombra.
No. Ahora en serio. Debo pedirte disculpas por las bromas que he gastado en la anterior entrada a proposito de tu nic. Me pierdo en cuanto tengo ocasión de hacer un chiste, y muchas veces meto la pata. De nuevo recibe mis disculpas.
Dices que entras en el blog muy a menudo y eso me alegra. También haces la media promesa de que tratarás de continuar comentando en él. ! Ojo con las medias promesas ! Porque en cuanto pase mas de una semana sin tener noticias tuyas, te lo estaré recordando... y como habrás podido comprobar tengo una vasta memoria para los detalles mas insignificantes.
En cuanto a lo de la foto... verás... no me caben ya en la cartera, con la de mi mujer y los niños, pero si a ti te apetece mandarla, seguro que encontraré una excusa creible cuando la vea MªDolores... soy muy bueno también excusándome... muy imaginativo. Pero si no estoy lo suficientemente convincente y esto es motivo de divorcio, pesará sobre tu conciencia eternamente. Con que, tu misma....
Por cierto... ¿Como sabes la edad que tengo? Eso me intriga ¡¡¡
Espero que puedas realizar esas etapas por Galicia y que puedas darle tu particular abrazo al Apostol en Santiago. Verás como las sensaciones en esos momentos son diferentes a cualquier otra, y ese instante en que llegas hasta el Obradoiro, o el rápido roce con la figura del Santo no lo olvidarás nunca. Verdaderamente especial.
Bienvenida de nuevo a La Amante del Camino.
Y tal y como anunciaba en el titulo, he conseguido, no sin esfuerzo, subir otras 370 fotos al album público de Picasa. También he incluido mi colección de fotos de alcantarillas de poblaciones del Camino. Si. ¿Que pasa? A cada loco le dá por un tema, y a mi me dió por las alcantarillas. El caso es que la mayoría de las fotos no son mías, sino de un francés que las tenía en su página web. Desde que me topé con ellas, he tratado de ir ampliando la colección y ya tengo unas cuantas.
El otro album que he colgado son las del tramo Logroño-Burgos realizado en 2.006, dado que ya van terminándose las etapas del 2005.
Espero que en un par de semanas tenga listas la fotos de León, tramo realizado este año 2007, así como las fotos de los diferentes reencuentros con los compañeros durante todo este tiempo. Puede que tambíen incluya las fotos presentadas a los concursos fotográficos que organiza mi Asociación de Amigos del Camino en Alicante, dentro de las actividades que desarrollamos.
PD: Como "La Amante" sea un barbudo con ganas de cachondearse de mi... me voy a enfadar mucho, eh ¡¡¡

Detecto sentimientos

Ayer comentaba un correo de Rafa (Almería) en el que transmitía cierta preocupación por la falta de comentarios de los lectores. Prometí pensar en ello... se me pasó pronto.
Pero hoy descubro un comentario del otro Rafa (Gambín... o puede que Nora) en el que transcribe una información aparecida en Internet, relacionada con los otros Caminos. Ya hablamos que existen infinidad de Caminos a Santiago, no solo el Francés que es, de momento, el objeto de mis relatos.
Y no me pasa desapercibida las intenciones de Rafa. Tratar de buscar otros temas, no solo la descripción lineal de unas etapas realizadas por mi durante una serie de años, una relación de gilipolleces que me hayan podido suceder a lo largo de la ruta, que son varias, o una descripción mas o menos exaustiva de personas, paisajes, lugares e iglesias.
No me pasa desapercibido pues, que otras personas, diferentes a este que os escribe, piensan por mi y tratan de dar con una solución a ese posible problema de la falta de implicación o inspiración de los lectores en cuanto a comentarios.
Eso me lleva a detectar, que al menos una cosa sí que está consiguiendo este blog. Y es que empieza a verse como propio por un sector que no solo lo considera como esos cinco minutos de relax en el discurrir del día, dedicados a conocer y leer mis confesiones en las iglesias, mi manera particular de entender la ingesta de percebes o mi recién descubierto amor por el Arte románico, los bosques y la naturaleza en general.
Algo me dice, que mas de uno se ha enganchado a esto del blog. Y me parece genial... para eso estaba pensado en un principio. Pero que además de considerarlo como algo propio, buscan la manera de mejorarlo, complementarlo... que llegue a ser como los blogs tradicionales, llenos de comentarios casi diarios de los visitantes, un foro de encuentro en el que se debatan ideas del día a día, noticias aparecidas en los medios de comunicación.
! Serio problema ¡ Ya que cuando inicié, allá por mediados del mes de Octubre del pasado año, el blog, mi idea no era otra que relatar un diario de viaje. Esto implicaba cierto handicap, dado que el "viaje" era al Camino de Santiago. El Camino, lejos de los canales tradicionales de agencias de viajes, no es un destino como lo pueda ser Cancún o un crucero por los Fiordos Noruegos, de los que prácticamente puede hablar todo el mundo o estar al alcance de cualquier bolsillo hoy en día y, una vez realizado, resaltar los pros y los contras de la aventura, compararlo con otros viajes (... pues mi cuñado hizo el otro crucero, el del barco mas grande, y les ponían cacahuetes en el aperitivo.... ! coño, cacahuetes... que bien y que suerte... que buen viaje, oye... si es que donde hay dinero... ¡¡¡)
Decir Camino de Santiago, aunque todo el mundo hoy día sabe de lo que se está hablando (pues mi cuñado lo hizo un año... eso si... en coche, como un señor... y le salió un callo en el dedo de tanto conducir, pero... ninguna ampolla en los pies.... ¿será por algo?) implica por su propia naturaleza un cierto "aura" en las personas que no lo han realizado. Mitad misterio, mitad admiración por el hecho de implicarse en una aventura de 800 Kms (Rafa: 1200) y todos pateados por caminos duros, expuestos a las inclemencias del tiempo y durmiendo en sitios considerados raros.
Eso hace que quien desconoce el Camino, o tiene del tema una noción a traves de terceros, no pueda aventurarse en intervenir en un debate con igualdad de condiciones. La primera idea que un no peregrino tiene de la aventura, es simplemente que se trata de una especie de deporte de riesgo. Riesgo en el sentido de desastibilizar el concepto de "vivir bien y comodamente" que uno tiene. Cierta idea de locura que le dá a la gente por ponerse a andar innesesariamente, aunque en el fondo, muy en el fondo, exista un sentimiento de... ¿cierto respeto? ¿admiración?... por aquello de "Algo tendrá el agua cuando la bendicen... aunque yo sigo con la Heinekken".
Por tanto es difícil que un no iniciado, con estas ultimas premisas, pueda "atreverse" a debatir un tema que no acaba de entender del todo.
También tenemos el eterno problema de la timidez de las personas. El corte de escribir algo que te pueda poner en evidencia, que indique como piensas o como te expresas. Existe el problema de "yo... es que... no sé escribir bien". Tal vez un problema nimio, ya que uno puede utilizar el Modo Anonimo del blog o utilizar un NIC con lo que nadie nos conocerá nunca. Recuerdo a la fugaz "Amante del Camino" (digo fugaz, porque solo fue un comentario, el que nos obsequió) Con ese NIC recuerdo que no me fijé si sabía redactar bien o cometía faltas de ortografía. Solo recuerdo que lo de "Amante" me sugirió infinida de cosas... ! Ya sé que puede que fuera un tipo gordo y con barba, ocioso o parado de larga duración, que se entretuvo un día conmigo y mi blog ! Pero estuve pensando en "ella" varios días. Lo reconozco.
De cualquier manera, y esto va por los que se están debanando los sesos, preocupados por darle cierta vidilla a este blog, e incluso a aquellos que aún no se atrevieron a comentar nada en él, que percibo el cariño que le estais poniendo a estas pocas líneas casi diarias. Que no me pasa desapercibido ese sentimiento de "propiedad" que va surgiendo poco a poco, y que me dá mas ánimos, si cabe, en mis entradas cada vez que lo hago.
A los que comentais... el mayor de mis agradecimientos. A los perezosos que no lo hacen... pues que no pasa nada, con tal de que sigais fieles a la lectura diaria. Teneis siempre a mano la posibilidad de intervenir cuando y cuanto gusteis. A todos de nuevo GRACIAS.
PD: Y a la "Amante del Camino"... por favor... mándame una foto que me saque de dudas, que estoy en un sin vivir... y si eres un tipo obesos y que no te lavas los dientes y apesta tu aliento... pues como le dijeron a Jack Lemmon... " NADIE ES PERFECTO"

miércoles, 6 de febrero de 2008

Café en el Pata de Oca

Antes de nada, dar la bienvenida a este blog a Carmen, una amiga de El Escorial que junto a su marido Luis Angel, caminó conmigo el día de la entrada a Burgos en Septiembre 2006.
Me cuenta que su ultimo tramo, León-Santiago, realizado este año, les fue de perlas. Incluso me manda una foto suya con la compostela recién conseguida, en la que se le nota una cara de felicidad, que supongo tenemos todos cuando por fin la tenemos en las manos. Pronto irán apareciendo en este blog, pues cronológicamente mi siguiente tramo es el de Burgos. De cualquier manera, gracias Carmen por unirte al grupito de lectores del blog.
También recibo un correo de Rafa de Almería, que se queja de que la peña no se enrolla con ningún comentario, y que parece que solo él se preocupa de darle vidilla. Creo al respecto, que los lectores disfrutan de la lectura, pero sobre todo, de esos comentarios que tu haces, a veces mordaces, otras ingeniosos, contribuyendo a que sea mas ameno y simpático. Pienso que cuando alguno tenga algo que decir, cuando alguien sienta necesidad de transmitir alguna cosa, pues ya lo hará. Tal vez sea que yo, dentro de mis limitaciones, quien no haya dado con la clave para provocar esa necesidad. Prometo pensar en ello.
Y continuando con la etapa de Los Arcos a Logroño, me quedé el día anterior necesitando un cortado en el bar Pata de Oca de Torres del Rio. El bar estaba regentado por un matrimonio joven, argentinos que habían acabado en aquel pueblo de la Rioja tan singular por su aspecto casi medieval. Recuerdo que pensé en las vueltas que da la vida para ciertas personas, sobre todo los inmigrantes, que de estar en un pais lejano, por los avatares y circunstancias de la vida, acaban en el otro lado del mundo, en pueblos perdidos. No es que fuera mal pueblo, todo lo contrario, pero se me hizo extraño que de Buenos Aires, uno pasara a vivir su vida en una localidad de apenas 180 habitantes incrustada en la Rioja. Pero se me pasó enseguida.
Lo curioso del local era que en una de sus paredes había dispuesto una serie de azulejos bien grandes que representaban los emblemas de casi todas la Ordenes de Caballería. Allí estaban la Orden de Santiago, la de Calatrava, Montesa, Alcantara, Caballeros del Santo Sepulcro, Hospitaleros de San Juan, Rodas y Malta, Caballeros Teutonicos, sin olvidar a la Orden del Temple que sin duda, y a tenor de su iglesia, habían tenido encomienda en el pueblo.
Tanto Javier como yo sacamos las cámaras y fotografiamos aquella rareza. Porque rareza era que un argentino hubiera tenido la ocurrencia de utilizar como reclamo o decoración de su establecimiento un tema, que sin embargo le iba como anillo al dedo. Tanto al pueblo por su cuidado aspecto, como al bar al borde del Camino de Santiago, y su relación con el medievo y las peregrinaciones. No quiero decir que por ser argentino no tuviera memoria histórica de la Edad Media europea, pero lo normal era que hubiera decorado aquello con temas relacionados con el tango, Eva Perón o Maradona y la albiceleste. Vamos, el tópico argentino.
En el bar ademas vendían todo tipo de articulos relacionados. Simbolos celtas, reproduciones en miniatura de armas medievales, libros y artículos de la peregrinación a Santiago. Pensé en Alvarito, el hijo de MªDolores, y le compré como regalo unos colgantes de barro cocido que representaban unas runas celtas. Tambien le compré una pulsera de goma azul con flechas amarillas del Camino, del tipo que, puestas de moda por el ciclista Lance Armstrong, pululaban de todos los colores por ahí. Por cierto que la pulsera, que me puse enseguida en la muñeca, a punto estuvo de producirme una gangrena por falta de riego sanguíneo, ya que era demasiado estrecha para mi mano.
El pueblo y el Bar habían sido un auténtico hallazgo. Una inesperada sorpresa en medio de extensiones de viñedos, futuro vino de Rioja. Por cierto, el café con leche riquísimo.

martes, 5 de febrero de 2008

Casi de noche hasta Torres del Rio

Miguel, aquel Jueves 15 de Septiembre de 2005, se salió con la suya. Sobre las 6 de la mañana se levantó y muy ladinamente, como el que no quiere la cosa, empezó a hacer ruido con su mochila, ya totalmente vestido. Los otros tres, ante el hecho consumado, fuimos levantándonos cansinamente. A mi me hubiera venido bien descansar un poco mas, dado que aquella noche viajaría de regreso a Alicante, y pensaba que no llegaría a pegar ojo durante todo el viaje.
Nos vestimos, aseamos, preparamos las mochilas y desayunamos un café con bizcochos gracias a Esperanza que la tarde antes había realizado la compra en un colmado del pueblo, y faltando aun bastante para las 7 de la mañana, ya estabamos en ruta.
Era noche cerrada aun, pero un camino llano, despejado y recto nos facilitó el caminar casi a ciegas. !!! Y como disfrutaba el de Enguera ¡¡¡ viendo al fin cumplido uno de sus mayores anhelos... salir temprano y adelantar camino. Rafa sin embargo de era de la misma opinión. Nos había costado mucho que se levantara aquella mañana, y caminaba rezongando en cola, haciendo la goma y protestando por el madrugón. Aquello parecía animar mas a Miguel, y si lo hubieramos dejado ir, hubiera llegado a Santiago de un tirón para la hora de la merienda.
Apenas clareaba sobre las 8, cuando ya habíamos cubierto los 6 Kms. que nos separaban de Sansol, entre viñedos y parcelaciones agrarias, y cruzabamos la peligrosa carretera por la falta de visibilidad, para primero bajar y luego subir una empinada y pedregosa cuesta hasta llegar a una pequeña plazuela del pueblo, donde sin embargo un par de abuelos tenían abierto ya una pequeña tiendecita. Esperanza hizo la compra. Pan, queso, chorizo y no pudimos resistirnos ante la vista de aquellos bocatas, con lo que nos pusimos a almorzar cuando sonaban las ocho campanadas en la torre de la iglesia de San Zoilo.
Estabamos allí comiendo cuando pasaron un par de jovenes franceses, con uno de esos pañuelos a cuadros palestinos, esos con borlitas que llevan todos los terroristas fedayines. Aquellos dos lo llevaban en la cabeza al modo de Peter O'Toole en la pelicula Lawrence de Arabia. No se me ocurrió otra cosa que saludarlos con un sonoro "Salan a li kum". Sonrieron, nos devolvieron el saludo y continuaron su marcha.
Tras acabarnos los bocatas continuamos la marcha, y nada mas salir del pueblo tuvimos una preciosa vista desde lo alto de Torres del Rio, siguiente población de la ruta a solo kilómetro y medio. Y en un suspiro, allí llegamos, dándonos la bienvenida la Iglesia del Santo Sepulcro. Debo aquí rectificar lo escrito unas entradas pasadas, cuando situé por error el Santo Sepulcro en la localidad de Cirauqui. (Muchas veces los datos se me entremezclan en la memoria, ya que escribo prácticamente de memoria, y debo estar cometiendo muchos errores de este tipo... pido perdón... sobre todo a los de ambas poblaciones por confundirlas... ¿Por cierto? ¿Hay alguien de Cirauqui por ahí leyéndomeeeeeee? No, supongo que no...) Como dije en aquella entrada, la iglesia era netamente templaria, octogonal y del siglo XII. Parecida a la de Eunate. Pero estaba cerrada con lo que nos conformarnos con verla desde fuera y fotografiarnos junto a ella.
Continuamos andando y empecé a sentir necesidad de un cafetito caliente. Descubrí un bar llamado Pata de Oca en el que entré seguido de Javier y Esperanza. Miguel andaba en cabeza dispuesto a lograr el maillot amarillo, y Rafa algo decolgado, paso de largo cuando llegó hasta allí.