lunes, 18 de febrero de 2008

Despedida en Logroño

Contesto a Rafa de Almeria, explicándole que Rafa Gambin no hace el Camino. Se está aficionando en buscar noticias relacionadas con el tema, pero solo por mantener y mejorar el blog de su amigo el peregrino. Sin duda el almeriense se confunde con otro Rafa, Rafa Quero, el ovetense con el que coincidí y andé por Galicia en 2004 y que, efectivamente, hizo al año siguiente el Camino del Norte, o puede que fuera el Primitivo, que empieza en Oviedo.
También recibo "off the record" nuevas entregas, con nuevas etapas del diario de Rafa durante este pasado 2007. Los exámenes de Febrero me tenían huerfano de sus aventuras. Me leo de un tirón todo lo nuevo que me manda, esta vez sus días, y muchas de sus etílicas noches, desde Pamplona hasta Navarrete, ya en La Rioja. Y como las otras veces me quedó entusiasmado con todas sus peripecias y la cantidad y variedad de gentes que conoció por la ruta. Es cierto que se extiende mas cuando de chicas se trata, pero a todos retrata con ese humor que le caracteriza. Me quedo con ganas de que avance en la redacción de su diario... me quedo con ganas de mas en esa estupenda aventura y que tan bien cuenta.
También por correo recibo recomendaciones del otro Rafa, Gambin, indicándome como mejorar la apariencia de este blog y mejorarlo. En cuanto tenga oportunidad me meteré de lleno a ello y veremos que sale después.
Y continuo con mis ultimas horas en Logroño relatando como el matrimonio vasco, en compañia de Miguel el de Enguera y un servidor, acabamos cenando en un vetusto bar de una de las calles del caco antiguo de Logroño. La cena fue copiosa y tras ella permanecimos de tertulia un buen rato. Flotaba en el ambiente cierto aroma a despedida y era el momento de apresurar lo que había que decirnos. A mi me quedaba una hora escasa para marchar. Javier y Esperanza partían a la mañana siguiente de vuelta a San Sebastian. Solo Miguel y Rafa continuaban, y no parecía que fueran a hacerlo juntos, por tanto nuestros caminos, que se habían juntado en las proximidades de Roncesvalles, se separaban y no existía en aquellos momentos la certeza de que volvieramos a vernos. La amistad sin duda perduraría y el recuerdo sería difícil de olvidar.
Regresamos al albergue, donde encontramos al almeriense enfrascado en sus charlas con el resto de peregrinos. Aun tuvimos tiempo de hacernos todos juntos unas fotos junto a una talla de un peregrino en la planta baja del gran albergue. Una de ellas sale, un poco fotogénico Rafa, debido al sombrero que me lleva, en la que parece lo que en realidad no es.
Subimos todos hacia la habitación y repasamos nuestras notas de nuestros respectivas direcciones y teléfonos para mantenernos en contacto, todo ello mientras yo revisaba mi mochila y resto de equipaje para el viaje de vuelta.
El abrazo con un Miguel emocionado que no paraba de decir que siendo casi vecinos, era seguro que volveríamos a vernos... y que sin embargo, hasta la fecha, me he reencontrado con todos los demas, mucho mas lejanos, pero no con él. La despedida de Javier y Esperanza también muy sentida. Ellos no descartaban hacerme una visita, ya que estaban acostumbrados a ir a Benidorm donde durante varios años mantuvieron un apartamento. Y el fuerte abrazo con Rafa, al que ya estaba echando de menos con sus ocurrencias y sus chistes. Con el solo supe decirle, entrecortadamente, que no cambiara nunca, y que siguiera siendo como era... y él, lógicamente, me hizo caso y continua como en aquellos días, dicharachero, mordaz e irónico.
No diré que con lágrimas, pero si que con un profundo mal sabor de boca por tener que dejar el Camino cuando mejor lo estaba pasando, enfilé escaleras abajo, y ante la extrañeza de la hospitalera al ver a uno de sus huespedes abandonar el albergue, me dirijí hacia la estación de autobuses, que estaba relativamente cerca, y donde llegué con casi dos horas de adelanto sobre la hora prevista de salida de mi bus.
Allí pensé que, curiosamente, seis días antes cuando llegaba a Pamplona, no pensaba que encontraría amigos tan increibles como las tres granadinas o los tres ovetences del año anterior. Que nada mas echar a andar, en Roncesvalles, los había extrañado enormemente, seguro de que eran irrepetibles, inremplazables. Sin embargo, acababa de dejar atras a otras cuatro espléndidas personas, cada una con su forma de ser como es lógico, pero increibles tanto individualmente como en grupo.
Me dispuse a esperar sobre un banco, rodeado de "la creme de la creme" del tercer mundo, ya que varios inmigrantes magrebies, o bien esperaban algun autobús nocturno como yo, o bien debían pasar la noche en uno de los bancos de la estación, como improvisada alcoba particular.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

PUES SÍ, CONFUDÍ A TU AMIGO RAFA GAMBÍN, CON TU COMPAÑERO DE CAMINO Y QUE SÍ ES ASTURIANO, MIS DISCULPAS.

Anónimo dijo...

Hola Peregrino:
Hacia tiempo que no me metia en tu blog, por motivos de trabajo. Me gustó mucho el relato de Cesar Borgia. Estabas bien documentado. A mi me gusta especialmente la historia y de hecho estudié letras. La geografia y la historia me apasionan. Es raro que en esta época haya gente que le gusten estos temas. Veo que escribes con mucha frecuencia y también que tienes seguidores, eso motiva bastante. A mi me distrae mucho leerte y me hacen mucha gracia tus expresiones.
Aqui tienes una ferviente admiradora y espero que sigas deleitandonos con tu página mucho tiempo. Por lo que veo cuidas la amistad y eso lo valoro mucho. Yo soy de trato facil y enseguida me relaciono con todo el mundo. Bueno compañero, enhorabuena por tu blog . Tienes una admiradora y seguidora de tus páginas. Un saludo.

Anónimo dijo...

Hola Peregrino:
Hacia tiempo que no me metia en tu blog, por motivos de trabajo. Me gustó mucho el relato de Cesar Borgia. Estabas bien documentado. A mi me gusta especialmente la historia y de hecho estudié letras. La geografia y la historia me apasionan. Es raro que en esta época haya gente que le gusten estos temas. Veo que escribes con mucha frecuencia y también que tienes seguidores, eso motiva bastante. A mi me distrae mucho leerte y me hacen mucha gracia tus expresiones.
Aqui tienes una ferviente admiradora y espero que sigas deleitandonos con tu página mucho tiempo. Por lo que veo cuidas la amistad y eso lo valoro mucho. Yo soy de trato facil y enseguida me relaciono con todo el mundo. Bueno compañero, enhorabuena por tu blog . Tienes una admiradora y seguidora de tus páginas. Un saludo.

Anónimo dijo...

Hola Alberto, creo que te llamas así, por la foto de presentación en Picasa. Que fotos más chulas. Se nota que te gusta la fotografia. Debes de tener un montón de ellas. Me gustan sobre todo las del primer año.
Me recuerdan la etapa que hice. Tus relatos son de lo más simpaticos y sobre todo los que hacen de tu gente. Te sigo a menudo, sobre todo el fin de semana que no trabajo. Hasta siempre